En los últimos días la carragenina se ha convertido en uno de los aditivos a tomar en cuenta, en la industria alimentaria. Y es que a partir del caso Pura Vida, los consumidores han tomado conciencia, o al menos así parece, sobre lo que ingieren.

Al ser un alga, es considerado como natural y muchas veces es confundido con la poligenina, señaló la ministra de Salud, Patricia García.

“La OMS conjuntamente con la FAO de manera periódica hace una evaluación de lo que llaman ellos los aditivos alimentarios y no de los temas que trata es acerca de la carragenina que es un producto natural que se extrae de las algas que muchas veces se confunde con otro producto que es la poligenina”, sostuvo.

La titular del Minsa explicó que la carragenina, al ser moléculas grandes, cuando pasa por el intestino no lo hace a través de la separación que tienen las células, “de tal manera que no es absorbido por el intestino, ni llega a la sangre; funciona como fibra y se usa como un espesante en los alimentos”, aclaró.

Agregó que de acuerdo a los informes de la FAO la carragenina no es considerado como un producto de cuidado.

“El uso de carragenina en formulaciones para infantes o formulaciones para productos médicos – que no debería preocuparnos – puede llegar hasta mil miligramos por litro. Lo que recomienda el Codex alimentario con respecto a la carragenina es mantener las preparaciones con niveles mucho más bajos que son 300 miligramos por kilogramo”, detalló.

Asimismo, insistió en que la poligenina no debe consumirse bajo ninguna circunstancia. Este último representa un medio de sustitución del plasma usado en la reposición de volumen para compensar o evitar una insuficiencia circulatoria por un déficit de volumen plasmático o sanguíneo. Su consumo debe ser con receta médica.

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