Bloomberg.- Probablemente no sea así como Daimler AG quería terminar la semana pasada.
El jueves, los ejecutivos fueron convocados a Berlín, donde los funcionarios cuestionaron a los directivos por las emisiones presuntamente excesivas de los motores de Mercedes-Benz.
La revelación asustó a inversionistas ya nerviosos por una crisis del diésel que no deja de crecer en la industria automotriz, lo que hizo que las acciones de Daimler bajaran 3%.
Luego el viernes, el fabricante de Mercedes-Benz perdió el patrocinio de la selección nacional de fútbol de Alemania que había estado en sus manos durante casi tres décadas. En su lugar, la marca de automóviles VW, el primer paciente de la crisis de las emisiones, tendrá el privilegio de patrocinar el deporte más popular del país a partir de 2019.
A decir verdad, Daimler ha tenido un desempeño por lo demás exitoso últimamente. Después de desalojar a BMW AG del puesto de fabricante de automóviles de lujo de más venta del mundo el año pasado, el fabricante de Mercedes-Benz ha dejado a sus competidores mordiendo el polvo con ventas récord de su renovado sedán Clase E y sus SUV de moda. Y a principios de esta semana, Mercedes resolvió una disputa con sus trabajadores que corría peligro de desembocar en huelgas.
Entretanto, Volkswagen AG, sociedad controlante de VW, ha tenido que pagar más de 22,000 millones de euros (US$ 25,000 millones) por daños relacionados con el escándalo del diésel, y la semana pasada los fiscales de Múnich detuvieron a un ex gerente de Audi, marca hermana VW, en relación con una investigación sobre el fraude de la compañía con las emisiones.
Audi está muy por detrás de Mercedes y BMW en el ranking de ventas de lujo, al que se lo sigue muy de cerca, en tanto la crisis del diésel incide en su imagen y una disputa con las concesionarias chinas perjudica la demanda en su mayor mercado.
Para VW, el contrato de patrocinio es un espaldarazo que indica que el fabricante de los autos Golf y Passat está empezando a salir del pantano de la crisis del diésel.
“Nos hemos fijado numerosas metas como empresa en los próximos años”, expresó el responsable de la marca VW Herbert Diess en un comunicado. “Volkswagen está cambiando. Tenemos muchos desafíos por delante”.
La asociación de Daimler con la liga de fútbol DFB había hecho de la estrella de Mercedes-Benz un símbolo omnipresente en los partidos, desde el autobús del equipo a las camisetas de los jugadores y anuncios de televisión con “Die Mannschaft”, como se conoce el equipo.
El fabricante de autos de lujo apoya al equipo desde la década de 1970, en parte con autobuses y choferes. No se revelaron los detalles financieros del acuerdo, que estará vigente hasta mediados de 2024.
Daimler salió perdiendo “después que la DFB por primera vez decidió realizar un proceso de licitación”, y VW ganó, dijo el fabricante de automóviles con sede en Stuttgart en un comunicado. “Deseamos a los equipos nacionales todo lo mejor en un futuro deportivo exitoso, aun cuando nuestra sociedad haya terminado”.