(Bloomberg).- Los precios de la vivienda en el Reino Unido crecieron a su ritmo más lento en cuatro años en junio, en una nueva señal de que el mercado inmobiliario se está enfriando.

Los precios crecieron un 2.6% frente al año anterior, según datos publicados por el banco Halifax en un informe el viernes. Trimestralmente, los valores cayeron un 0.1%, y 1% respecto al mes anterior.

Casi todos los indicadores de precios de la vivienda en el Reino Unido están mostrando una desaceleración. Las concesiones de hipotecas cayeron a un mínimo de siete meses en abril, según el Banco de Inglaterra, ya que el aumento de la inflación frena el gasto de los consumidores.

Los cambios fiscales y la incertidumbre en torno a la salida del Reino Unido de la Unión Europea también pueden estar frenando la demanda.

“Aunque los niveles de empleo continúan aumentando, la economía de los hogares se enfrenta a una creciente presión debido a que los precios al consumidor están subiendo más rápido que los salarios”, dijo Martin Ellis, economista especializado en el sector de la vivienda en Halifax.

“Esto, junto con el nuevo impuesto a la compra de casas para alquilar en 2016, parece haber debilitado la demanda de viviendas en los últimos meses”.

Sin embargo, un entorno continuo de bajos tipos hipotecarios junto con una falta de viviendas a la venta debería contribuir a apuntalar los precios, agregó.