CRECIMIENTO. El PBI se expandió 3.64% en junio. Tuvieron que pasar diez meses para que todos los sectores productivos volviesen a mostrar variaciones positivas. Entre agosto del año pasado –cuando se inició el Gobierno de PPK– y junio, las contracciones plagaban las cifras del INEI y a las actividades que acumulaban caída tras caída (construcción, manufactura no primaria) se sumaron otras que sufrieron los embates de El Niño costero (agro, minería, electricidad y agua) o sintieron el enfriamiento de la demanda interna (comercio, finanzas y otros servicios).

La economía nacional tocó piso en abril (apenas creció 0.17%) y la mitad de sus catorce sectores registró caídas. Todo un récord. Pero los dos meses que siguieron reflejaron los efectos de la notable recuperación de la pesca, que incidió en los auspiciosos números de la manufactura primaria, así como en la exportación de bienes pesqueros tradicionales y no tradicionales. Además, la minería y el agro superaron el bache del periodo febrero-mayo, aunque la mejor noticia fue la expansión de la construcción, tras nueve meses consecutivos de retroceso. Estos resultados se explican por la mejora de las condiciones meteorológicas, la generosidad del mar y, especialmente en el caso de la construcción, por el efecto estadístico: el INEI reportó mayor inversión en obras mineras, edificación de oficinas y viviendas, así como ampliación de universidades. El comportamiento de este componente en los próximos meses confirmará si el sector privado ha recuperado la confianza, o si junio fue un dato aislado.

En cuanto al Estado, la inversión aumentó en el Gobierno Nacional (12.19%) y los gobiernos locales (9.64%), pero disminuyó 20.68% en los gobiernos regionales. El ministro de Economía, Fernando Zavala, ha declarado que la inversión pública aumentará 7.5% este año –la mitad de lo que prometía su antecesor–. Pero para evitar que dentro de un par de meses tenga que anunciar un ajuste de ese ofrecimiento, su mayor desafío es hacer que los montos presupuestados y transferidos a las otras instancias de gobierno sean efectivamente ejecutados.

La experiencia en reconstruir zonas afectadas por desastres naturales ha sido pésima –ayer se cumplieron diez años del terremoto del sur chico– y las primeras noticias de la rehabilitación por El Niño no son alentadoras: el Gobierno Regional de Piura está teniendo complicaciones en el otorgamiento de licitaciones. No hay que olvidar que la parte estatal del gasto será clave para reanimar los sectores que todavía están enfriados