Bloomberg.- Al Gobierno de España le está costando seguir el ritmo del auge económico.
El trabajo del Gobierno avanza a paso de tortuga con sólo cuatro leyes aprobadas por el Congreso de Madrid en lo que va del año.
Dos fueron retoques al sistema judicial, una estableció normas para la devolución de obras de arte robadas y otra aprobó el presupuesto 2017, con un retraso de un año.
Esta escasa actividad parlamentaria pone de relieve la debilidad del Gobierno minoritario encabezado por Mariano Rajoy en su esfuerzo por lograr que se hagan las cosas.
La economía se encamina a un crecimiento de más del 3% en 2017 por tercer año consecutivo, pero España está perdiendo la oportunidad de acometer reformas que elevarían su desempeño en los próximos años, dijo Ángel Talavera, economista de Oxford Economics en Londres.
“En estos momentos, la economía está ignorando la política”, dijo Talavera por teléfono. “Éste sería el momento indicado para abordar problemas estructurales”.
El Gobierno también emitió 13 decretos hasta junio que incluyen medidas para ayudar a los propietarios de viviendas que han hecho pagos excesivos por hipotecas y normas para el empleo en puertos.
Es una situación muy diferente de 2012, cuando Rajoy trataba de guiar a España durante una crisis bancaria y económica en su primer año completo en funciones.
Ese año, la Administración empleó su amplia mayoría en ese momento para aprobar 17 leyes y 29 decretos, que incluyeron medidas integrales para flexibilizar el mercado laboral español, una reestructuración del sector bancario y un presupuesto de austeridad.
Si bien una mayor participación del Estado no necesariamente se traduce en beneficios para la economía, la disminución de la actividad pone de relieve la menor influencia del Gobierno de Rajoy.
Mientras tanto, organizaciones como el Fondo Monetario Internacional siguen instando al presidente a tomar más medidas para mejorar el potencial de crecimiento centrándose en el desempleo y en fomentar la productividad.
“Se ha logrado muy poco en términos de reforma fiscal, pensiones, financiación regional, y no espero avances en esto”, dijo Talavera. “El escenario político fragmentado dificulta un consenso amplio entre los partidos”.