El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) expresó su rechazo a las imágenes y textos de la reciente campaña publicitaria de la empresa Ladrillos Lark.

La ministra del sector, Carmen Omonte, dirigirá oficios a la empresa Ladrillos Lark y a la Asociación Nacional de Anunciantes del Perú (ANDA) expresando el rechazo al tratamiento de la mujer en dicha campaña publicitaria.

Recordó que el Estado Peruano promueve el desarrollo de la imagen de las mujeres sobre la base del respeto y la dignidad a las que todo ser humano tiene derecho.

Por eso, comentó que es parte del Plan Nacional de Igualdad de Género que los medios de comunicación emitan mensajes no sexistas y mejoren también el tratamiento informativo, así como la imagen de la diversidad que muestran de las mujeres, aspecto que se extiende al ámbito de la publicidad.

“El MIMP viene impulsando la campaña denominada: ‘La mujer no es un objeto ¡Trátala con respeto!’ que busca evidenciar la existencia de situaciones discriminatorias y prácticas sociales que legitiman el que se considere a las mujeres como objeto’, recordó Omonte.

Esta campaña fomenta la participación de la sociedad en el cuestionamiento de las creencias e imaginarios sociales que toleran, transmiten, justifican y refuerzan situaciones discriminatorias, incentivando el cambio de actitudes e involucrando a los varones en la reflexión sobre los beneficios de comprometerse con la igualdad con las mujeres.

El MIMP recordó que el objetivo de la igualdad real entre mujeres y hombres requiere de la acción decidida del Estado y la sociedad en su conjunto, incluyendo las empresas anunciantes y las agencias de publicidad para fomentar en sus mensajes una cultura de igualdad y no discriminación conforme a las normas vigentes.

“Todos y todas tenemos la responsabilidad de fortalecer una cultura de respeto de las personas, así como la obligación de emitir mensajes libres de toda forma de discriminación y de mejorar el tratamiento informativo y la imagen de las mujeres”, señaló.

El MIMP exige a las empresas privadas y a los medios de comunicación no utilizar mensajes sexistas que van en contra de los valores de una sociedad igualitaria libre de violencia y que garantiza los derechos de las mujeres.

“Acompañamos la indignación de quienes se han pronunciado en contra de estos mensajes y, como sector, adoptaremos las acciones correspondientes para que estas prácticas no vuelvan a repetirse”, precisó la ministra Omonte.