Bloomberg.- Microsoft se propone usar celdas de combustible en sus parques de servidores que consumen mucha electricidad, y dice que la tecnología puede duplicar la eficiencia de la energía utilizada.
La compañía de software está probando cómo usar los dispositivos para generar electricidad y planea instalar una pila de combustible de 10 megavatios dentro de unos años a un costo de aproximadamente US$ 45 millones.
“Esta tecnología es muy, muy disruptiva, y estamos invirtiendo mucho tiempo y dinero en ella”, dijo Sean James, director de investigaciones del programa de investigación y desarrollo sobre estrategia energética de Microsoft. “Casi podríamos duplicar la eficiencia eléctrica. Lo hemos podido modelar y medir en el laboratorio con las celdas de combustible”.
En un tiempo tan costosas que solo se utilizaban en laboratorios y proyectos espaciales, las pilas de combustible se han extendido a aplicaciones más comerciales en busca de formas de energía de menor contaminación.
Generan electricidad a través de una reacción química que involucra gas natural, hidrógeno o un biocombustible. Las empresas que las desarrollan, como Ballard Power Systems, Ceres Power Holdings y FuelCell Energy, también están tratando de utilizarlas para la calefacción del hogar y para ampliar la gama de vehículos eléctricos.
La inversión en la industria de celdas de combustible ha bajado en los últimos años, disminuyendo un 85 por ciento entre 2015 y 2016, según datos de Bloomberg New Energy Finance.
“Si bien las pilas de combustible se consideraban la respuesta a los vehículos eléctricos en la década de 2000, nunca lograron alcanzar la escala de economía que hemos visto con las baterías”, dijo James Frith, analista de almacenamiento de energía de Bloomberg New Energy Finance. “Esto llevó a que las pilas de combustible quedaran en gran medida en el camino”.
Buen mercado
Los centros de datos son un buen mercado para las celdas de combustible a causa de la cantidad de energía que consumen. En todo el globo, consumen más del 1% de la electricidad mundial.
Se espera que esta demanda aumente a medida que la población del mundo se vuelva cada vez más conocedora de la tecnología y más objetos se conviertan en dispositivos, conforme todo, desde los termostatos hasta las teteras, se conecte a internet.
Para el año 2020, se prevé que entrará a internet 1 millón de dispositivos nuevos por hora, según Microsoft.
Microsoft también se siente atraída por las celdas de combustible porque producen menos gases de efecto invernadero que las fuentes tradicionales. Emiten pequeñas cantidades de CO2, pero no contaminantes como el azufre o los óxidos de nitrógeno que normalmente se producen al quemar combustibles fósiles.
La compañía obtiene el 50% de su electricidad de la energía solar, eólica e hidroeléctrica y apunta a aumentar esa proporción al 60% para 2020.
Si bien usará gas natural en sus celdas de combustible al principio, buscará obtener un combustible limpio como el hidrógeno generado a partir de energía renovable y ha firmado acuerdos de compra de energía con desarrolladores solares y eólicos, dijo James.
Aunque a Microsoft le gustaría instalar celdas de combustible en sus centros de datos lo antes posible, la industria es incipiente y no es posible comprar los dispositivos a la escala que la compañía necesitaría, según James.
