Bloomberg.- Twitter implementará nuevas políticas para combatir el acoso y las insinuaciones sexuales indeseadas en el sitio de la red social después de que la decisión reciente de desactivar la cuenta de una actriz famosa desatase una ola de indignación.
La empresa dijo que suspenderá de forma inmediata y permanente toda cuenta que acose claramente a alguien o publique imágenes de desnudos sin consentimiento del sujeto. La nueva política también adopta una postura más dura frente a las insinuaciones sexuales no deseadas en el servicio, perfeccionando las vías por medio de las cuales los terceros pueden denunciar las conductas inapropiadas.
“Una política y un enfoque del cumplimiento de las normas más agresivos llevarán a la eliminación de más contenidos de nuestro servicio”, declaró Twitter el martes en un comunicado. “Tenemos que mejorar a la hora de explicar nuestras políticas y fijar las expectativas respecto de un comportamiento aceptable en nuestro servicio”.
La semana pasada, Twitter recibió numerosas críticas por desactivar temporalmente la cuenta de la actriz y directora Rose McGowan. Ella había usado la plataforma de la red social para exponer a supuestos infractores de la industria del entretenimiento después que se acusó al productor de Hollywood Harvey Weinstein de agresión sexual. En aquel momento, Twitter afirmó que su cuenta estaba bloqueada temporalmente por publicar un número de teléfono privado.
Como protesta, las mujeres boicotearon el sitio durante un día, y algunos plantearon que la rapidez de Twitter para suspender la cuenta de McGowan contrastaba con la típica ambivalencia de la empresa al vigilar a los usuarios que provocan a las mujeres con contenidos explícitos o violentos. Algunos tuitearon que silenciar a la víctima de una agresión sexual desalienta a otras mujeres de informar sus experiencias.
Tradicionalmente, la empresa con sede en San Francisco defiende a ultranza la libertad de expresión y la conversación sin filtro. Esa actitud comenzó a cambiar en tanto un aumento de los incidentes de insultos en el sitio alejó a algunas personas. En 2016, la empresa formó un Consejo de Confianza y Seguridad y realizó importantes actualizaciones al producto para ayudar a combatir los insultos.
Las políticas de Twitter están siendo evaluadas más que nunca porque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, es un usuario asiduo. La empresa no le prohibió tuitear, pese a los críticos que dicen que algunos de sus tuits violan las normas de Twitter.
En respuesta a consultas por un tuit polémico de Trump sobre Corea del Norte publicado el 24 de septiembre, Twitter afirmó que la empresa “sometería todas las cuentas a las mismas normas y tendría en cuenta varios factores al evaluar si un tuit viola nuestras reglas”.