Bloomberg.- El principal tratamiento de Merck & Co. contra el cáncer ha continuado su explosivo crecimiento a medida que la farmacéutica se perfila como posible líder en uno de los mercados más lucrativos para el sector farmacéutico.
Las ventas del fármaco Keytruda crecieron más de un 100% respecto al año anterior hasta los US$881 millones en el segundo trimestre, dijo Merck en una declaración el viernes.
La compañía está apostando su futuro al producto, que pertenece a una clase revolucionaria de medicamentos nuevos que activan el propio sistema inmunitario para atacar tumores.
El anuncio de su éxito de ventas llega un día después de que uno de sus principales competidores anunciara un fracaso en un estudio. AstraZeneca Plc anunció el jueves que un tratamiento similar, que aún está en fase de prueba, falló en un estudio crítico entre pacientes de cáncer de pulmón.
El fracaso impulsó a Merck y asestó un golpe a las esperanzas de AstraZeneca y las de su rival Bristol-Myers Squibb Co., que está desarrollando un plan similar y ha sufrido sus propios reveses.
Los tropiezos de sus competidores posicionan a Merck a la cabeza entre los fabricantes de este grupo de nuevos fármacos, y continúa reforzando esa posición.
El jueves, Merck anunció un acuerdo con AstraZeneca para comercializar otro medicamento contra el cáncer, Lynparza, por un máximo de US$8.500 millones.
Las ganancias de Merck en el segundo trimestre, excluyendo ciertas partidas, aumentaron a US$1,01 la acción, superando la estimación media de 87 centavos de los analistas. Las ventas totales crecieron menos de un 1 por ciento a US$9.930 millones, superando también las estimaciones.
Las acciones de la farmacéutica subieron un 1.4% a US$64.60 a las 7:18 de la mañana en Nueva York, antes de la apertura de los mercados.
Pero no todo va viento en popa para Merck. La farmacéutica de Kenilworth, Nueva Jersey, dijo que sus medicamentos principales, los tratamientos para la diabetes Januvia y Janumet, se enfrentan a “una continua presión sobre los precios” y la compañía todavía está lidiando con las consecuencias de un ciberataque que provocó daños a gobiernos, empresas y operadores portuarios entre otros. Merck no ha dado proporcionado cifras sobre los daños económicos del ataque de “Petya” aunque sí dijo que había afectado sus operaciones mundiales de fabricación, investigación y ventas.