Durante el 2016 las ventas de los supermercados bordearían los S/ 11,900 millones en el Perú (US$ 3,560 millones) lo que representará un crecimiento en moneda local de 4% respecto al 2015, proyectó el Scotiabank .

Si bien esta cifra es baja en comparación al promedio de los últimos años, este ritmo de expansión sería mayor respecto del 3.2% estimado para el sector comercio en su conjunto, señaló el analista del Departamento de Estudios Económicos del Scotiabank, Carlos Asmat.

Esta evolución estaría sustentada en parte por estrategias de precios bajos de las cadenas de supermercados, las cuales continuarían impulsando la venta de productos vía promociones –utilizando diversos medios de comunicación-, tratando de fidelizar a los consumidores, explicó en el Reporte Semanal del banco.

A ello se sumaría la maduración de las tiendas inauguradas a fines del 2015 -alrededor de ocho nuevas tiendas inauguradas en el último trimestre del 2015- y las que se implementarían en el 2016, tanto en Lima –con formatos adecuados al tamaño de la población objetivo-, como en provincias –especialmente en zonas con baja penetración retail-, algunas de las cuales se instalarían como tiendas ancla en futuros centros comerciales.

Sin embargo, el crecimiento sería menor a lo registrado en años previos debido a una menor creación de empleo formal –crecería menos de 1% en el 2016-, asociado a la caída de la inversión privada por tercer año consecutivo.

“Para el 2017, esperamos un mayor dinamismo del sector, en parte debido a la recuperación de la inversión privada, que impulsaría la creación de empleo formal, a lo que se sumaría la constante penetración del sector debido a que se mantendría la inauguración de tiendas a nivel nacional, históricamente al menos diez nuevos locales por año”, indicó.

Es así que el Scotiabank espera que las ventas de los tres operadores principales superen los S/ 12,000 millones durante el 2017, manifestó Asmat.

Asimismo, las firmas continuarían impulsando la venta de productos vía internet (e-commerce) con la finalidad de reducir el tiempo de compra de sus productos (click and collect y delivery)-.

A ello se sumarían los esfuerzos para elevar la venta de productos de marcas propias, en los distintos formatos de tiendas, con la finalidad de mejorar sus márgenes y generar economías de escala, reduciendo el gasto en publicidad al ser marcas vinculadas a las firmas del sector.

En línea con los antes mencionado, las empresas han puesto especial énfasis en la expansión de locales con el formato de tiendas de descuento, los cuales al ser locales de menor tamaño -respecto de un supermercado tradicional-, requieren un menor nivel de inversión, comentó.

Este nuevo formato, que seguiría una estrategia de precios bajos y con mayor presencia de marcas propias, buscaría elevar la participación del canal moderno, al competir directamente con bodegas y puestos de mercado, e inclusive indirectamente con el formato de tiendas de conveniencia.

Por lo antes mencionado los principales operadores continuarían implementando nuevos locales a nivel nacional, especialmente en ciudades con poca presencia retail.

Por ello, las empresas estarían instalando locales en ciudades intermedias, ya sea mediante el formato tradicional de supermercados, o mediante el formato de tiendas de descuento.

En este contexto, el Scotiabank estimó que se inaugurarán alrededor de 11 nuevas tiendas durante el 2016, número similar al registrado en el 2015.