Bloomberg.- Airbus SE planea comprar una participación mayoritaria en el programa de aviones a reacción de pasajeros Serie C de Bombardier Inc., lo que inyectaría un importante apoyo financiero y experiencia a un proyecto que pondría a prueba las ambiciones de venta de aviones de China.
Los potenciales compradores de la Serie C tienen la tranquilidad de que Airbus, con su presencia mundial, suministrará apoyo al jet en cualquier parte, algo que la estatal Commercial Aircraft of China (Comac) no puede hacer.
El fabricante de aviones chino, que aún no obtuvo como cliente a una aerolínea internacional importante,tendrá que redoblar esfuerzos para vender la aeronave C919 mientras compite empatada en el segmento más popular de los jets de un solo pasillo.
“La inversión de Airbus en el programa de la Serie C significa más competencia para Comac, ya que la Serie C compite también con el C919”, dijo Corrine Png, presidenta ejecutiva de Crucial Perspective Pte. en Singapur. Esto “se suma al mucho más establecido avión de fuselaje estrecho de Airbus y Boeing Co.”, agregó.
La compañía europea fabricante de aviones adquirirá una participación de 50.01% en una sociedad que controla el Serie C, un avión de pasillo único con capacidad para entre 108 y 160 pasajeros que ha dejado a Bombardier, que tiene sede en Montreal, con escasez de dinero luego de que los costos excedieran US$ 2,000 millones lo previsto.
Airbus, que proporcionará ventas y marketing, así como atención al cliente, llevará el valor del programa a más del doble, dijo Alain Bellemare, el máximo responsable de Bombardier.
Eso podría plantear más desafíos a las ambiciones de China de vender un avión que compita de forma directa con la compañía canadiense. La compañía estatal Commercial Aircraft of China, que en mayo probó su avión C919 de pasillo único de fabricación local, tiene pedidos de 730 aviones que dependen de la certificación de entes reguladores.
Comac obtuvo en julio la aprobación para iniciar la producción masiva de su avión regional de 90 asientos. El desarrollo del C919, así como los aviones regionales, forman parte del programa gubernamental “Made in China 2025”, que consideró que el sector aeroespacial era uno de los que podrían acelerar el avance industrial del país.
El C919 pondrá a Comac en competencia directa con el 737 de Boeing y el A320 de Airbus, así como con el Serie de C de Bombardier.
Línea de montaje
Al incorporar el Serie C a su oferta de aviones más grandes, Airbus, que tiene sede en Toulouse, Francia, trae un nuevo producto a su cartera al tiempo que obtiene acceso a un avión moderno cuyo desarrollo le cuesta a Bombardier más de US$ 6,000 millones.
Airbus agregará otra línea de montaje final para el avión en su fábrica de Mobile, Alabama, para atender a clientes estadounidenses.
“El programa del Serie C está por completo certificado”, dijo Nick Heymann, un analista de William Blair & Co. “Tiene un desempeño mejor que el esperado, y ahora tiene como socio a una de las dos mayores compañías fabricantes”.
El acuerdo podría dar a Airbus mayor influencia sobre los proveedores chinos de componentes para el Serie C, dijo Yu Zhanfu, jefe del sector aeroespacial y de defensa para la Gran China en Roland Berger Strategy Consultants en Pekín.
Bombardier analizó una posible venta de una participación en su programa del Serie C con firmas estatales chinas, comprendida Comac, antes de llegar a un pacto con Airbus, según personas familiarizadas con las conversaciones.
Comac rehusó hacer declaraciones sobre el acuerdo con Airbus y su departamento de medios dijo que no estaba al tanto de conversaciones con Bombardier.