Especial Tu Dinero. Cada vez es más común que a la hora de buscar un alojamiento, los usuarios acudan a las llamadas Otas (Online Travel Agencies) como Booking.com, para comparar y encontrar los precios más bajos. Pero, ¿qué pasa cuando estos portales ofrecen tarifas tan económicas que ni las propias marcas las pueden igualar?
Eso es lo viene ocurriendo con los hoteles que operan en la Unión Europea, cadenas que alegan que Booking.com, una agencia que nació hace 22 años en Amsterdam y que hoy lidera Gillian Tans, su CEO, disfruta de una posición dominante en el merado apalancada por su participación, las cláusulas de paridad que comparte con los jugadores en el mercado y las comisiones de hasta 25% que cobran por funcionar como una vitrina mundial.
Y es que no es para menos, pues de acuerdo con Gustavo Toro, presidente de Cotelco, “no estar en esas plataformas hoy significa estar por fuera del mercado”, razón por la que considera que existe una “posición dominante muy importante” y a ello se suma que las cláusulas de paridad exigen al hotel no tener tarifas inferiores a las de las agencias en sus propios canales de venta online. Este comportamiento ha sido tema de investigación por las autoridades como la Superindustria no solo en Colombia sino en el mundo.
Sobre este tema, Johanna Pinzón, jefe de e-commerce de Hoteles Dann, explicó que “a nivel hotelero cada cadena puede fijar la tarifa porque esa es una decisión del hotel, pero hay restricciones para usar esos precios en los canales electrónicos ya que una de las condiciones por contrato es la paridad en todos los canales online”.
Por esa razón, Toro, como representante del sector, explicó que Cotelco sí cuestiona que haya una posición dominante, ya que “no estar en las plataformas es un suicidio”.
Aún así, el directivo también aceptó que estas agencias tienen un poder de negociación muy amplio porque el consumidor busca a través de ellas y ellas, a su vez, invierten en AdWords y buscadores, tienen un músculo financiero muy grande y además están monitoreando constantemente el mercado.
Por esto, LR habló con Pablo Márquez, socio del buffet MBCR sobre este asunto en términos de competencia. “No hay un abuso de la posición de dominio porque hay múltiples agencias y uno puede buscar la mejor oferta”, dijo.
En ese sentido difícilmente puede haber un abuso de la posición de dominio porque no hay un único jugador que pueda definir las condiciones del mercado y así mismo, no hay un cartel porque el escenario requeriría que haya un acuerdo de precios.
Aún así se mantienen en el tintero dos dificultades más: las sanciones por infringir la cláusula de paridad y las elevadas comisiones que cobran las Otas de entre 15% y 25%.
Sobre la primera, Pinzón explicó que “uno de los problemas es que tienen robots que identifican las disparidades y penalizan a los hoteles. Pero en ocasiones solo es un error de la plataforma”. En ese sentido, aseguró que la penalidad perjudica a las cadenas porque no puede tener tarifas diferentes en su propio canal y además las multan con posicionamiento.
Sin embargo, para Márquez, esta es una “decisión de negocio”, pues las plataformas están evitando que haya competencia intramarca. “Es lo mismo que para con los concesionarios de automóviles”, concluyó.
Sobre las comisiones, Pinzón dijo que cuando se hace el contrato se acuerda el porcentaje de comisión y no es un valor que dependa del volumen sino un markup que ellos ya tienen estipulado para todos los hoteles. Esta situación sin ser o no juzgada aún está poniendo en jaque a los hoteles en el mundo.
Diario La República
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)