Sao Paulo (Reuters).- J&F Investimentos, accionista mayoritario de JBS SA, el mayor procesador de carnes del mundo, acordó el martes en la noche junto a fiscales brasileños pagar una multa de 10,300 millones de reales (US$ 3,200 millones) por su rol en un enorme escándalo de corrupción.
En un comunicado, los fiscales de cinco investigaciones sobre corrupción dijeron que la compañía controlada por la familia Batista pagará la multa en un plazo de 25 años, a partir de diciembre. Los fiscales dijeron que esta es la multa más grande de su tipo en el mundo.
J&F pudo reducir el valor final en 900 millones de reales desde los 11,200 millones de reales propuestos inicialmente por los fiscales. Las tres propuestas anteriores de J&F fueron rechazadas y la compañía reemplazó a sus abogados el martes.
Los testimonios de los propietarios de J&F, Joesley y Wesley Batista, que reconocieron haber gastado 600 millones de reales para sobornar a casi 1,900 políticos en los últimos años, sumergió a Brasil en una crisis que amenaza con derribar al presidente Michel Temer.
Joesley Batista está en el centro de una investigación de corrupción a Temer, después de haber grabado en secreto una conversación en la que el presidente pareció consentir un pago secreto de dinero a un posible testigo. Temer niega haber cometido un delito.
La mayor parte de la multa, u 8,000 millones de reales, se dividirá entre el banco brasileño de desarrollo BNDES, el fondo de indemnización para los trabajadores FGTS, dos fondos de pensiones para empleados de firmas controladas por el Estado y el prestamista Caixa Econômica Federal.
Los fondos de pensiones y los bancos estatales invirtieron u otorgaron préstamos a empresas de J&F a cambio de sobornos pagados por los hermanos Batista, de acuerdo con un acuerdo de delación compensada.
Los fiscales dijeron en el comunicado que la multa es equivalente al 5.6% de los ingresos de las empresas del grupo. Los inversores en acciones de JBS han estado observando de cerca las negociaciones relativas al acuerdo de delación compensada.
Las acciones de JBS se han desplomado más de un 25% este mes en operaciones volátiles por el temor a que las consecuencias del escándalo puedan limitar sus opciones de financiamiento.