Buenos Aires (Reuters).- Argentina acordó pagar unos 500 millones de dólares a cinco empresas para que retiren demandas ante paneles arbitrales de organismos internacionales, en una medida que busca mejorar la imagen del país ante los inversores en medio de una dura batalla legal contra tenedores rebeldes de deuda.
Las empresas incluidas en el acuerdo son Azurix, Blue Ridge Investments, Vivendi, Continental Casualty Company y National Grid. Las cuatro primeras habían demandado a Argentina ante el Centro Internacional de Arreglos de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) del Banco Mundial, mientras que la restante ante un panel de las Naciones Unidas.
El arreglo incluye resarcir a las compañías con dos títulos públicos en dólares, el Bonar 2017 para el capital y el Boden 2015 para los intereses, a cambio de una quita del 25% en los 677 millones de dólares que exigen como indemnización por las pérdidas acarreadas debido a medidas tomadas durante la crisis financiera argentina del 2001.
“La quita fijada en valor nominal a todos los acreedores por igual representa un 25 por ciento respecto del monto originalmente reclamado, equivalente a un ahorro fiscal de 171 millones de dólares”, dijo el Ministerio de Economía del país sudamericano en un comunicado.
Varias empresas han demandado a Argentina ante el CIADI y otros paneles de controversias comerciales por supuestos incumplimientos contractuales causados por medidas que incluyeron el congelamiento de las tarifas de compañías de servicios públicos y su conversión de dólares a pesos en medio de una fuerte devaluación.
Hasta ahora, el Gobierno del país sudamericano se había negado a compensar a las empresas que han obtenido fallos arbitrales favorables con el argumento de que debían litigar en tribunales locales, lo que llevó a Washington el año pasado a cancelar una serie de beneficios comerciales al país.
Como parte de la campaña de presión, Estados Unidos además votó en contra del otorgamiento de nuevos préstamos a Argentina en el directorio del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo.
El país sudamericano también necesita el apoyo de Washington en su larga y multimillonaria batalla judicial con tenedores de deuda en cesación de pagos que se han negado a aceptar quitas a cambio de bonos que el país honra regularmente.
Argentina aún enfrenta demandas en el CIADI por casi 20,000 millones de dólares, dijo la consultora Desarrollo de Negocios Internacionales en un informe.
La mayor es la interpuesta por el grupo español Repsoldebido a que no fue compensado por la expropiación de su 51% en la petrolera YPF el año pasado. Repsol valoró en unos 10,000 millones de dólares la participación.
Azurix, que prestaba servicios de agua potable, y Blue Ridge, que heredó la demanda cuando compró la participación de CMS Gas Transmission Company en una transportadora de gas natural en Argentina, habían obtenido sentencias favorables en el CIADI por más de 300 millones de dólares en conjunto.
El Ministerio de Economía dijo que los bonos fueron entregados a valor nominal, lo cual supone una quita adicional teniendo en cuenta su valor de mercado, y que ingresaron al país unos 68 millones de dólares por compromisos de las compañías de reinvertir en un título local el 10% del monto reclamado.