Han pasado más de 25 años desde la creación de la primera entidad regulatoria del Perú y 16 años desde que se dio la Ley Marco de Organismos Reguladores.
Es por ello que desde la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso se inició un trabajo para modificar el marco normativo de las entidades regulatorias peruanas.
Según el presidente de este grupo de trabajo, el congresista Miguel Castro, este grupo de trabajo elaborará un proyecto de ley luego de recoger las opiniones de las cuatro reguladoras del país. Se espera que este trabajo esté culminado este año para iniciar su debate.
Fortalecer la autonomía
Para lograr estos cambios se instaló una mesa de trabajo, en la que participaron los nuevos presidentes de Osiptel, Sunass, Ositran, Indecopi y el vicepresidente de Osinergmin.
En esta primera sesión, todos coincidieron en que es fundamental fortalecer la autonomía de los organismos reguladores, para así cumplir sus labores sin tener las presiones políticas de los gobiernos.
“Hay que notar que dentro de este marco de autonomía bastaría un decreto supremo para poder cambiar la organización de los organismos reguladores. Por ejemplo, si se pensara fusionar los organismos bastaría un decreto supremo. Ese es el nivel normativo de autonomía con el que contamos en este momento”, afirmó el presidente de Osiptel, Rafael Muente.
Por su parte, la presidenta de Ositran, Verónica Zambrano, refirió que si bien la norma actual señala que los reguladores sí cuentan con autonomía, esta muchas veces no ha sido respetada.
“Si estos organismos reguladores no actúan de manera neutral, imparcial, técnica, finalmente los inversionistas pierden confianza en ese organismo regulador y no se pueden replicar otras inversiones a futuro”, refirió.
En esa misma línea el presidente ejecutivo de Sunass, Iván Lucich, refirió que es fundamental para su trabajo mejorar la autonomía económica, que en todos los casos proviene del aporte de los propios regulados.
Recursos humanos
En esa misma línea, los reguladores plantearon la necesidad de mejorar su capacidad de administrar los recursos humanos con los que cuentan, pues tienen limitaciones para atraer a los profesionales necesarios para cumplir con su función.
“En Ositran ya vamos a entrar a supervisar el contrato de la Hidrovía Amazónica, y yo ya había definido a un técnico que podía trabajar con nosotros, pero ya se lo llevó la concesionaria y no tengo cómo convencerlo de que venga al Estado porque no le ofrezco las mismas condiciones”, dijo Zambrano de Ositran.
De la misma manera, el presidente de Osiptel señaló que el tema remunerativo es una preocupación, pues por este motivo es muy fácil que los profesiones que allí trabajan sean captados con facilidad por las entidades reguladas y dejan al regulador.
“Se necesitan mejores capacidades que los concesionarios”, precisó el presidente de Sunass, Iván Lucich.
En esta reunión, se estableció que las entidades regulatorias participarán directamente en la nueva norma, que busca adecuarse a las recomendaciones de la OCDE.