Del 30 de noviembre al 11 de diciembre tendrá lugar en París una nueva cumbre mundial para reducir las emisiones de CO2 y evitar el cambio climático, señaló Gonzalo Garland, economista y profesor del IE Business School.
En economía los efectos negativos de una actividad se llaman externalidad negativas, y a nivel nacional los Estados crean sistema para tasar esos efectos y compensar a los perjudicados por las mismas. A nivel mundial, sin embargo, no existen entidades capaces de imponer esto y ese es el objetivo del COP21 París.
Tras Kyoto muchos países (sobre todo europeos y Japón) ya comenzaron a tasar esas externalidad mediante impuestos sobre las emisiones de CO2 mediante impuestos (como Japón que pone una tasa de US$ 2 por cada tonelada de CO2 emitidos a las empresas o Suecia con una tasa de 150 dólares) o mediante la creación e mercados de CO2 que permiten a las empresas que dejan de emitir CO” vender sus derechos a otras y obtener así un incentivo para reducir las emisiones de CO”.