WASHINGTON (AP) — Con la presión de una fecha límite encima, el Congreso aprobó el miércoles una iniciativa de ley para evitar un inminente impago de deuda y para dar fin a 16 días de cierre parcial del gobierno. La medida fue enviada al presidente Barack Obama para su promulgación.
El Senado la aprobó primero, con votación de 81-18. Más tarde la Cámara de Representantes lo aprobó con 285-144. Tras la aprobación en la cámara baja, sólo faltaría la firma del presidente Obama, el acto final de un épico drama político que puso en riesgo la estabilidad económica.
La legislación permitirá al Tesoro emitir deuda de manera normal hasta el 7 de febrero o quizá por un mes más, y al gobierno seguir financiando sus operaciones hasta el 15 de enero. Más de dos millones de trabajadores federales —los que siguieron trabajando y aquellos que recibieron suspensión temporal sin paga— recibirán su sueldo de modo retroactivo.
En la Casa Blanca, Obama saludó el voto del Senado. Una vez que la medida llegue, “la firmaré inmediatamente”, aseveró el mandatario. “Comenzaremos a reabrir rápidamente nuestro gobierno y podemos levantar esta nube de incertidumbre de nuestras empresas y gente”.
Los republicanos tenían otras preocupaciones. “Dimos una buena pelea. Sólo que no ganamos”, reconoció el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, cuando los legisladores votaron por la iniciativa. La medida no incluye nada para los republicanos, quienes pedían erradicar o acotar la ley de salud insignia de la presidencia de Obama.
“La solución alcanzada le dará a nuestra economía la estabilidad que desesperadamente necesita”, dijo el senador Harry Reid, líder de los demócratas en el Senado, al agregar que la nación “estuvo al borde del desastre” antes de lograr el acuerdo.
El líder de la bancada republicana en la cámara alta, Mitch McConnell, dijo que, con el acuerdo, se mantuvo una ronda de recortes al gasto negociados hace dos años con Obama y los demócratas. Como resultado, “el gasto del gobierno ha bajado dos años seguidos”, por primera vez desde la guerra coreana. “Y no nos retractaremos en este acuerdo”, dijo McConnell, quien negoció con Reid el acuerdo.
La medida, que es sólo una tregua temporal, establece un marco de tiempo para que a comienzos del próximo año posiblemente se enfrenten Obama y los republicanos otra vez por el gasto y el endeudamiento.