Japón anunció recientemente que duplicará su masa monetaria en dos años para inyectar liquidez y combatir la recesión. Gayle Allard, profesora del EI Business School, aseguró que esta medida impactará en la industria latinoamericana.
La catedrática advirtió la llegada de nuevos capitales podría “recalentar” las economías de la región, aumentando el apetito de los inversionistas por activos de alto riesgo y el valor de las divisas locales, lo que afectaría el sector manufacturero.
“Es importante que los gobiernos tomen las medidas para evitar burbujas y no tengan miedo de enfriar sus economías”, anotó.
América Latina -subrayó- vive un período de bonanza sin precedentes: Altas reservas, pobreza en disminución, inflación controlada, deuda externa baja entre otros.
“Me pregunto si estamos inundando el mundo de liquidez. Los capitales podrían llegar en busca de rentabilidad, siendo vulnerables principalmente México y Brasil”, observó.
Economía japonesa
Allard recalcó que el estímulo “no convencional” del banco central nipón es el más grande desde que los japoneses lanzaron esta herramienta en el 2001, y Estados Unidos y Reino Unido lo ha seguido recientemente.
“Hasta el momentos, los afectos han sido positivos porque bajó el yen y subieron las acciones de la bolsa. En el corto plazo, veremos más inversiones. Pero existe el riesgo que se generen distorsiones. Japón sufrió una burbuja en los noventas y por ello ahora tienen cautela en los mercados financieros”, explicó.
Finalmente, remarcó que no es seguro que la política monetaria expansiva resuelva la recesión japonesa, pues los problemas son estructurales: exceso de ahorro en el sector corporativo, decreciente población económicamente activa, entre otros.