Milagros Sánchez
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“Del dicho al hecho, hay mucho trecho”,¿se cumplirá dicho refrán en la ley laboral juvenil? Hay una buena intención del Gobierno, pero la capacitación laboral debería precisar que las empresas se agrupen por sectores, porque de lo contrario, cualquier empresario capacitaría como mejor le parezca, indicó Jorge Chávez, presidente de Maximixe.
Según Jorge Chávez, la norma es innecesaria porque ya existe la ley de formación laboral (modalidades formativas), que contempla la subvención a jóvenes estudiantes por conocimientos adquiridos dentro de las empresas, pero necesita perfeccionamiento.
El tema de fondo es que la principal causa de desempleo juvenil es la falta de educación, según Chávez. “No ha habido capacitación adecuada en los colegios, antes se estudiaba cursos de orientación técnica o administrativa, esto se rompió y es necesario retomarlo”, anotó.
De esta manera, Chávez sentenció que el Gobierno propone las capacitaciones a los jóvenes de manera muy tangencial, estableciendo la posibilidad de que las empresas reciban hasta el 1% de la planilla como subsidio para capacitar a los jóvenes.
En esa lógica, el economista consideró que no debería darse el privilegio a cualquier empresa de usar un subsidio de capacitación. “El Ministerio de la Producción debería crear programas de capacitación que agrupen a empresas por sectores. Por ejemplo, un call center podría agruparse con otras empresas de ese rubro y analizar juntos la falta de competencias en los jóvenes”, aclaró.
Además, recomendó que dichas capacitaciones no sean realizadas por cualquier institución educativa o instituto, sino por un centro especializado en formación en alternancia.
Lamentablemente, hay pocos centros especializados en el Perú. “El centro de formación conoce la pedagogía, y la consultora pone el conocimiento específico del sector. Ambas se juntan para desarrollar un programa que funcione”, acotó.
Otro punto importante que rescató, es la participación de jóvenes en el diseño de dichos programas de capacitación. Comparó a situaciones en Gran Bretaña, donde los mismos jóvenes diseñan el programa en equipo con la participación de una consultora, el centro de formación y la misma empresa.
En conclusión, Chávez sentenció que en tiempos de desaceleración, como la que evidencia la economía peruana, no es oportuna la ley suscrita porque podría generar despidos de otros trabajadores (fuera del rango de edad) en el futuro.
Este sector sería los que tengan más de 24 años de edad, porque podría suscitarse que las empresas prefieran a los más jóvenes ya que son menos costosos.