La flamante ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Mónica Rubio, dejó sentir su experiencia en la implementación de políticas sociales durante su primera entrevista pública. Dijo enfática: “Todos queremos poner nuestra marca, nuestro corazón. El mío será el perfeccionamiento de los programas sociales”.
En su experiencia profesional durante deiciocho años en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), trabajó con programas de transferencias condicionadas en América Latina como Juntos, en el caso de Perú, y recientemente venía trabajando en temas de desarrollo infantil temprano.
Ese compromiso profesional ahora lo aplicará en el Gobierno: “Espero poder traer esta experiencia de redes de protección social, de programas de transferencias condicionadas y de programas para el desarrollo infantil temprano”.
En lo demás, “tomará la posta” de Carolina Trivelli, como corresponde “continuar con la implementación de esta política de inclusión social”. “Vengo a seguir corriendo esa carrera”, dijo en TV Perú.
Y aseguró que cumplirá cabalmente con los dos roles del Midis en insertar en el desarrollo a las poblaciones más necesitadas: el de rectoría y el de coordinación.
“No hay manera de avanzar en las metas sociales, como la desnutrición crónica infantil, sino conjugamos el esfuerzo de todos los sectores, gobiernos locales e incluso el sector privado. En el tema de la desnutrición, un problema con causales múltiples, mi principal tarea es marcar un norte y hacer que las voluntades confluyan”, explicó.
(Lea la hoja de vida de la nueva ministra de Desarrollo e Inclusión Social)