El Nobel de Economía 2007, Eric Stark Maskin, recomendó a los países emergentes como el Perú que sus gobiernos participen en la capacitación de los trabajadores del nivel D a través de subsidios a las empresas, ya que este grupo es el más afectado con la globalización.
Según el economista, los trabajadores del nivel D son los que menos se benefician con la globalización, por ser los menos capacitados, mientras que los del nivel C, que tienen algún tipo de preparación, sí se benefician pues intercalan roles con los más educados (niveles A y B). Este hecho incrementa desigualdad en países emergentes.
Para cambiar esta situación Maskin considera que es el Estado el que debe intervenir en la capacitación de los trabajadores del nivel D, ya que las empresas privadas no tienen los incentivos suficientes para hacerlo. Incluso si los capacitan tendrían que pagarles más,lo que incrementaría sus costos.
“La empresa podría recibir un subsidio o un beneficio fiscal tributario (reducción de impuestos) por la capacitación de los trabajadores menos capacitados y así se beneficia la empresa, el trabajador y todo el país, porque se reduce la desigualdad”, dijo.
Maskin se encuentra en el Perú participando en el XXV Seminario Anual CIES 2014. Tras su conferencia de hoy no solo consideró que la desigualdad en los países emergentes necesita la participación directa del Estado, sino que también es buena la flexibilización laboral.
Consideró que hacer que los mercados laborales sean más flexibles, es una buena idea, porque hace que la economía en conjunto sea más eficiente y eso puede contribuir a la reducción de la pobreza.
“No creo que la flexibilización del mercado laboral vaya a resolver el problema (de la desigualdad) de ninguna manera. Para hacerlo tiene que haber participación del Gobierno”, añadió.