Bogotá (AP).- La despenalización del consumo de drogas debe ser la base de cualquier política de salud y no los arrestos o encarcelamientos de consumidores debido a que causan muchos daños, destacó el viernes la Organización de los Estados Americanos (OEA) en su informe sobre el problema de las drogas en la región.
Aunque el documento de la OEA no toca uno de los asuntos más sensibles y debatidos como es si se debe o no legalizar completamente el consumo de cocaína y marihuana, en su análisis sí menciona que “la despenalización del consumo de drogas debe ser considerada en la base de cualquier estrategia de salud pública”.
Según el organismo interamericano, “un adicto es un enfermo crónico que no debe ser castigado por su adicción, sino tratado adecuadamente. Si no es posible pasar de la noche a la mañana a un cambio radical en el tratamiento de los adictos, al menos debería comenzarse con métodos de transición, como las cortes de drogas, la reducción sustantiva de penas y la rehabilitación”.
El informe fue presentado por el secretario general de la OEA José Miguel Insulza y el presidente colombiano Juan Manuel Santos.
Las “medidas restrictivas de libertad son antagónicas de este enfoque y sólo deberían usarse cuando esté en riesgo la vida del adicto o cuando su conducta constituya un riesgo para la sociedad”, añadió la OEA en el informe.
El estudio, elaborado por mandato de los jefes de Estado de la región y tuvo un costo de US$ 2.2 millones por varios países de la región y organismos financieros internacionales.