Bloomberg.- Estados Unidos, México y Canadá concluyeron la primera ronda de conversaciones sobre un nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y dijeron que están comprometidos a terminar las negociaciones rápidamente con un pacto de gran alcance.
“Si bien se requerirán un gran esfuerzo y muchas negociaciones en los próximos meses, Canadá, México y EE.UU. están comprometidos con un proceso de negociación acelerado y amplio que mejorará nuestro acuerdo y establecerá estándares del siglo XXI en beneficio de nuestros ciudadanos”, dijeron los países el domingo en un comunicado.
La próxima ronda de negociaciones está programada para el 1 al 5 de septiembre en México. Las rondas siguientes se realizarán en Canadá a finales de septiembre y luego en Estados Unidos en octubre.
“Para el resto del año” se están planificando rondas adicionales, dijeron los países.
La declaración conjunta refuerza la noción de que los tres países buscan alcanzar un acuerdo rápido antes del próximo año, cuando la agenda estará enfocada en la política.
México celebrará elecciones generales en julio del próximo año, mientras que las elecciones legislativas en Estados Unidos están programadas para noviembre de 2018.
El inicio de la primera ronda estuvo marcada por tensiones la semana pasada, cuando el representante de Comercio de EE.UU., Robert Lighthizer, notificó que su país no aceptaría un “ajuste” modesto de un acuerdo comercial que el presidente Donald Trump cree que ha fallado a los estadounidenses.
Si bien el comercio de EE.UU. con sus socios del TLCAN ha aumentado más del triple desde que el acuerdo entró en vigor en 1994, Trump dice que el pacto ha perjudicado la industria manufactura estadounidense y enviado empleos fabriles a México.
A los expertos en comercio no les sorprendió el sentido de cauto optimismo de la declaración conjunta.
“A pesar de las buenas intenciones, esta renegociación del TLCAN puede ser más parecida a un largo proceso de terapia de parejas que un ejercicio veloz de citas rápidas”, dijo Chad Bown, miembro sénior del Instituto Peterson de Economía Internacional, con sede en Washington.
La vaguedad y el tono positivo de la declaración final han dejado abierta la posibilidad de que Estados Unidos resuelva sus diferencias con México y Canadá, dijo Inu Manak, un profesor invitado en el Instituto Cato en Washington.
La parte difícil de las negociaciones vendrá más tarde, cuando se aborden temas delicados como los sistemas de resolución de disputas y las reglas de origen que dictan los requisitos de contenido local en los productos, dijo.
Los grupos de negociación acordaron proporcionar texto, comentarios o contrapropuestas adicionales en las próximas dos semanas, de acuerdo con la declaración conjunta.
“El alcance y volumen de las propuestas durante la primera ronda de negociación refleja un compromiso de los tres países con un resultado ambicioso y reafirma la importancia de actualizar las normas que rigen la mayor área de libre comercio del mundo”, según el comunicado.
Lighthizer dijo la semana pasada que Estados Unidos buscará mejoras en varias áreas, incluyendo reglas de origen más estrictas, estándares laborales más fuertes y protecciones contra la manipulación de monedas.
Trump ha amenazado con romper el pacto si no puede conseguir el cambio que busca.