La alerta sanitaria internacional en la conserva de pescado ha puesto en el ojo de la tormenta la inocuidad en los alimentos que llegan del exterior, sobre todo en los productos hidrobiológicos.

Al respecto, el director ejecutivo del Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (Sanipes), Ernesto Bustamante, dijo que, tras conocerse las primeras denuncias de los consumidores, se dispuso la investigación a las importaciones realizadas por la empresa Buenasventas Distribuciones S.A.C, para la marca Idelbueno.

Esta operación concluyó en las sanciones al laboratorio como Entidad de Apoyo, Cerper, y el retiro de las conservas de caballa que se importó de la empresa china Tropical Food Manufacturing (NINGBO) Co. Ltd.

Por ello, Sanipes siguió con la revisión de las importaciones y en el análisis de las contramuestras determinaron que este no era un proceso aislado, sino que se trataría de problemas sanitarios desde el productor.

“A lo largo del año se han realizado 39 importaciones y en la primera revisión de dos envíos de 44 mil latas y 140 mil latas, se han detectado los problemas sanitarios en la detección de parásitos”, expresó.

Por ello, se dispuso las medidas en alerta de la salud pública.

¿Más importaciones contaminadas?
“Hay nuevos procesos de investigación de conservas y congelados importados”, dijo Ernesto Bustamante.

Aunque la alerta se ha dado por la importación de China, el director ejecutivo dijo que se han recibido denuncias por el atún enlatado procedente de Tailandia, que se está investigando y que también es comercializado por varias empresas peruanas de alimentos.

De la misma forma, ya se han detectado problemas sanitarios en el jurel congelado procedente de Chile, que no llegaría de dicho país, sino que tienen origen en países del Asia.

“Estamos realizando un análisis genético de lo encontrado y determinaremos con mayor precisión el origen del problema, y de evidenciarse alguna situación grave se procederá a la comunicación con la autoridad sanitaria chilena o alerta sanitaria”, expresó.