La caída que sufrió el precio del petróleo en los últimos años afectó a los commodities y, en particular, a los hidrocarburos.
Esto se tradujo en los resultados de las empresas del sector de gas, que descendieron en conjunto 65.3% en el 2015, frente al año previo, según datos de la SMV.
“A partir de junio del 2014, en todas las empresas de hidrocarburos, y no solo en Perú, ha habido una caída espectacular de las utilidades”, indicó Aurelio Ochoa, experto en temas energéticos.
El especialista refirió que en Camisea, por ejemplo, el gas se cotiza en relación al 10% del valor del barril de petróleo residual, que es una canasta compuesta por cuatro tipos de crudo.
Al cierre del cuarto trimestre del 2015, Pluspetrol Camisea obtuvo una utilidad neta de US$ 66.3 millones, lo que representa una disminución de 62% respecto a diciembre del 2014.
Dicha caída, según la empresa, se debe principalmente a las menores ventas de líquidos de gas por US$ 202.1 millones. Esto, a consecuencia de “condiciones macroeconómicas” que afectaron los precios internacionales del oro negro.
Ochoa explicó que EE.UU. ha elevado su producción de petróleo de exquisito (o shale oil). Ello empuja a la baja la cotización de dicho combustible y, a su vez, la de su bien sustituto: el petróleo convencional.
Los resultados de Pluspetrol Camisea se vieron afectados, además, por castigos de pozos no exitosos por US$ 20.7 millones.
En paralelo, durante el mismo periodo de análisis, Pluspetrol lote 56 reportó una utilidad neta de US$ 7.8 millones al cierre del 2015, observándose una baja de 91% en comparación al año precedente.
De acuerdo con la memoria de la empresa, el desplome se explica por una disminución de los ingresos en 51%, a consecuencia del menor precio del gas y de los líquidos de gas.
Aunque las productoras del combustible no son las únicas que están viviendo momentos difíciles. Ochoa señaló que Shell ya no está pagando US$ 16 o US$ 18 por balón de BTU, como en el 2014, sino la mitad.
Esto perjudica a los proveedores de la corporación petrolífera, como Perú LNG que transforma del estado gaseoso al estado líquido el gas de Camisea a temperaturas muy bajas, para poder transportarlo y exportarlo, comentó el experto.
TGP, que también transporta gas natural para su distribución en el mercado interno, no vio disminuidas sus ganancias el año pasado, pero solo crecieron 1.3% en comparación al 2014.
Asimismo, Cálidda, que administra el sistema de distribución de gas natural en el departamento de Lima y en la Provincia Constitucional del Callao, reportó una caída de sus utilidades de 4.1%.
Sin embargo, a diferencias de los casos anteriores, esto no se explica por menores ingresos, sino por mayores gastos
“Los comercializadores son afectados (por los precios del crudo en picada), pero no tanto como los productores”, dijo Ochoa.