Si algo tienen en común todas las profesiones que están naciendo es cómo influyen en ellas las nuevas habilidades. Los reclutadores son conscientes de la dificultad de encontrar perfiles cualificados en las nuevas posiciones, por lo que se fijan más en competencias como la capacidad de aprendizaje, la adaptación al cambio en un entorno en constante evolución y la creatividad para presentar continuamente nuevas soluciones.
“Hoy, lo que te hace más empleable es presentar todas estas capacidades. Se requieren en todas las posiciones, hasta en las más técnicas. Así, el experto en tecnología deberá tener una gran visión global para saber situar toda la información en un contexto internacional; o un especialista en realidad aumentada y mundo virtual tiene que ser muy creativo, por ejemplo, para aplicar su conocimiento al mundo de los juegos”, señala Elena Sánchez, experta en talento y gestión del cambio.
Además, al tratarse de posiciones tan novedosas muchas veces las compañías no saben definir exactamente las funciones que va a desarrollar el nuevo experto. De hecho, algunas empresas no pretenden tanto cubrir un puesto como encontrar talento aunque no exista una posición concreta para él. Como consecuencia, aparecen nuevos criterios en los procesos de selección. Esto no significa que dejen de importar las habilidades técnicas, de hecho siguen siendo un factor muy importante. Pero como es de esperar, la evaluación de las competencias son ya un criterio más a la hora de elegir un candidato y son primordiales para acceder a las nuevas posiciones.
A las aptitudes, le siguen la actitud y el grado de adaptación que tiene el candidato con los valores de la organización. Para evaluar todo ello, las empresas van más allá de la clásica entrevista con el candidato y organizan dinámicas de grupo con todos los aspirantes para ponerles a prueba y comprobar sus habilidades con casos prácticos.
Así, si hay algo que va a ser esencial en todas las profesiones es la empatía. Las competencias digitales no deben sustituir a la capacidad para relacionarnos y ofrecer una experiencia única. Así se está demostrando en sectores como el turismo y ventas, en los que se busca ofrecer productos individualizados para cada cliente, por lo que la capacidad de personalizar el mensaje es crucial.
Además, en un contexto en constante cambio también se vuelve imprescindible la capacidad de gestión del conflicto, así como la capacidad de liderazgo tanto en perfiles júnior como sénior.
Otros criterios realmente novedosos que resultan clave durante los procesos de selección son las actividades extracurriculares y de voluntariado. Ahora más que nunca el seleccionador se va a fijar en aquello que has hecho mientras estudiabas o trabajabas en tu anterior empleo.
Diario Expansión de España
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)