El e-learning es un método de capacitación para trabajadores a través de Internet, lo cual permite llegar a un espectro mayor de personas con relación a las capacitaciones presenciales y a un menor costo pero ¿qué posibilidades de desarrollo tiene este nuevo servicio?.
“El e-learning es efectivo cuando se tiene que capacitar a una gran cantidad de personas, cuando hay una alta rotación, una dispersión geográfica, cuando hay formación continua también, por ejemplo”, detalló Roy Justo, fundador de Compendio.
Justo indicó que en la región de América Latina, en el que está el Perú, el e-learning tiene buenas perspectivas de crecimiento y para el próximo año se espera un nivel de crecimiento de 16%.
“El próximo año se tendría un mercado de alrededor de US$ 2,000 millones, ya que en la región es tendencia usar el software para diversos servicios y se consume mucho servicio empaquetado”, declaró a gestion.pe.
Agregó que hay una muy buena perspectiva para este mercado en la región y en países como el Perú pero no solo para las grandes firmas del sector sino también empresas locales.
Compendio es una empresa de e-learning de bajo costo, rápida para el usuario y efectiva para hacer que las personas aprendan a realizar sus procesos de trabajo. Se trata de la primera empresa de e-learning en el Perú, enfocada en procesos.
Este proyecto está siendo acelerado por UTEC Ventures, aceleradora de la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC) que genera y acelera la innovación en emprendimientos de base tecnológica con alto potencial de crecimiento.
Consecuencias
Justo indicó que el principal beneficio del e-learning es el uso de menor tiempo, lo cual representa un alto valor para las organizaciones empresariales.
“Tenemos jefes que tienen que volver a capacitar a su personal, lo cual genera muchísimo desgaste. Hacer esta capacitación de forma presencial puede resultar costoso y hasta poco efectivo”, anotó.
En ese sentido, advirtió que una mala capacitación de trabajadores podría generar pérdidas de hasta 70% para las empresas, según una medición de la Sociedad Americana para el Control de la Calidad.
“Eso se ve cuando las personas están dando vueltas sin saber realmente cómo hacer sus labores o están haciendo reprocesos, fallas, entre otros problemas, y eso es algo que los jefes no se dan cuenta y piensan que las personas están bien entrenadas”, anotó.
Por ello, explicó que una manera de evitar eso es el monitoreo permanente, tal como permite el e-learning, del nivel de conocimientos de las personas sobre sus procesos de trabajo y cuando se detecten detecten deficiencias pues se le establece un repaso de su capacitación.