Tendencia molesta
Los reclutadores , consultores de remuneración y buscadores de empleo reconocen que hoy los salarios son mencionados cada vez más en las primeras etapas del proceso de selección, ya sea como un requisito en las solicitudes de empleo online, o durante las entrevistas iniciales.
Esta tendencia resulta irritante para los candidatos, principalmente para aquellos de cierta edad y nivel salarial, a quienes les preocupa que un salario por el que trabajaron sea ahora un obstáculo para conseguir un empleo .
Josh Rock, un reclutador de personal en Fairview Health Services, una red sanitaria con 20,000 empleados en Minnesota, afirma que durante la última recesión, los gerentes de contratación usaron preguntas relacionadas con la remuneración de los candidatos. Se hace como una forma rápida de filtrar la gran cantidad de candidatos para las vacantes.
Algunos ejecutivos de recursos humanos aseguran que preguntar sobre el salario desde el principio del proceso ayuda a contener los costos de remuneración , y ahorra a los reclutadores el trabajo de perseguir candidatos que después resultan muy costosos.
Susan Vitale, directora general de márketing de iCIMS Inc., proveedora de software de reclutamiento de Matawan, en Nueva Jersey, concluye que “desafortunadamente, algunos clientes usan ya el tema del salario como una pregunta de filtro”.
El salario de mañana
Concentrarse en las remuneraciones pasadas estanca los salarios futuros “porque ahora las vacantes están siendo llenadas con personas cuyas expectativas de sueldo son mucho más bajas”, asegura Thomas Kochan, profesor de investigación de empleo en la Escuela de Gestión Sloan, del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT).
Un sesgo peligroso
Aquellos que buscan empleo y tienen una edad más avanzada ya ven la remuneración como un sesgo. Raymond Peeler, asesor legal sénior en la Equal Employment Opportunity Commission, una agencia del gobierno estadounidense que protege a los trabajadores contra la discriminación, señala que “los empleadores pueden tomar decisiones basándose en argumentos financieros, y eso no implica necesariamente una discriminación por edad. Lo que un empleado tendría que probar es que el empleador está utilizando el posible nivel salarial como un factor para descalificar a todos los candidatos de mayor edad”.
Asimismo una buena parte de los profesionales acepta una reducción salarial cuando opta a un nuevo empleo tras un largo periodo fuera del mercado laboral, pero en los mayores de 45 años, todo esto impacta mucho más en ellos que en los menores de 35 años, según un estudio de Linda Barrington, directora ejecutiva del Instituto para Estudios de Remuneración de la Escuela ILR de la Universidad de Cornell y su colega Hassan Enayati.
Algunos empleadores dudan a la hora de contratar a alguien con un salario muy por debajo del que recibía anteriormente. Les preocupa que la persona se resienta al ganar mucho menos. “Si alguien aspira a 100,000 dólares al año y se debe conformar con 75.000, no va a estar contento”, dice Steve Gross, especialista en remuneración y socio principal de Mercer.
Quién decide
A los profesionales, les gustaría la oportunidad de decidir por ellos mismos. Algunos candidatos temen que la pregunta sobre los antecedentes salariales los excluya desde el principio del proceso, por eso deciden poner un número ficticio en el campo requerido en los formularios online.
Diario Expansión de España
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)