Cuando Altomayo frenó su expansión en malls, replegarse no estaba en sus planes. De manera firme, pero silenciosa, la cadena de cafeterías reorientó su crecimiento hacia los aeropuertos de provincia y hoy ya tiene más de 30 puntos.
Jessica Ríos, subgerente general de la empresa, señaló que el negocio ha funcionado bien en dichos terminales. Sin embargo, el nuevo objetivo es internacionalizarse ingresando a los “hubs” aeroportuarios de América Latina.
“Estamos tratando de desarrollar una propuesta artesanal y de marca más vinculada al Perú, un concepto diferente con artesanías para recrear las emociones y situaciones que vende el café”, comentó la ejecutiva.
Así, Altomayo planea entrar a los aeropuertos de Lima, Panamá y otros de gran tránsito de turistas. Cada cafetería demandaría entre US$ 100,000 y US$ 250,000, “inversión que vale la pena por el ticket que estos locales reportan”, dijo Ríos.
“No llega a ser el doble que en malls pero es superior, se puede vender bebidas de 16 oz cuando lo normal en otros sitios es 12 oz. Es un consumidor que valora la calidad y lo saludable, pero a la vez es muy exigente”, indicó.
Expectativas
En el marco de su participación en Expoalimentaria señaló que si bien las cafeterías le permiten un mayor acercamiento al consumidor, la venta de café tostado soluble es el mayor negocio de la empresa de Corporación Perhusa. En esa categoría, estiman al cierre del 2015 un crecimiento de un dígito, afectado por el menor consumo en el canal moderno. Aunque mantienen el optimismo para los próximos años por su creciente participación.
En este mercado Altomayo compite con Nescafé, Café Britt, entre otras.
Cifras y datos
Incursión. La primera cafetería de Altomayo abrió en el 2008 en MegaPlaza.
Café gourmet. Esta línea crece más de 10% cada año y tiene acogida en bodegas.
Orgánicos. Solo está en supermercados, pero hay potencial en otros canales.
Perhusa. Exporta café orgánico y en grano verde.