Por Manuela Zurita
La inversión social suele confundirse con el concepto de RSE, observa Baltazar Caravedo, director del Centro de Liderazgo de la Universidad del Pacífico. “La RSE no es un proyecto: es una identidad, una propuesta para transformar los vínculos que despliegan las organizaciones con sus entornos interno y externo para asegurar su continuidad en contextos dinámicos y cambiantes”, define el académico. Así, la inversión social es parte de esa iniciativa de cambio.
Con ese espíritu, una parte del empresariado peruano ha apostado de forma estratégica por la mejora de los niveles de nutrición y del acceso a la educación y la salud. Las tres realidades lo exigen. Si bien la desnutrición en niños menores de cinco años disminuyó en un tercio desde el 2000, sigue afectando hoy al 18,1%, en tanto que un 32,9% sufre de anemia. Esta última enfermedad no da tregua: el año pasado se incrementó 2,2% en relación con el 2012.
Por otro lado, el 71% de niños y jóvenes de cinco a 24 años asisten a centros de estudios primarios, secundarios y terciarios, pero la asistencia decrece a medida que aumenta su edad. En las ciudades, accede el 73,1%, mientras que en el campo lo hace el 68,2%. El acceso a servicios de salud también es insuficiente. El 38% de la población rural más pobre no lo tiene: el 22,3% porque no tiene dinero y el 6,4% por falta del servicio o personal calificado.
En ese contexto, vale destacar las ideas y los resultados de los programas de RSE de varias compañías.
Educación
La Fundación Romero se concentra en dos tipos de programas a través de su fundación. Por un lado, junto con el BCP y el Ministerio de Educación, promueven la capacitación en el uso de softwares educativos a docentes de primaria y secundaria en 12 regiones. Hasta ahora, han pasado por el programa 8.246 docentes: 228 están en condiciones de formar a otros colegas y 20 son líderes regionales. Por otro lado, junto con Ransa, la Dirección Regional de Educación del Callao y la Municipalidad de Miraflores, alienta el desarrollo de capacidades emprendedoras y conocimientos de gestión empresarial en estudiantes de secundaria.
En total, 1.500 se capacitaron y se otorgaron S/. 19.000 en capital semilla para la aceleración de pequeños negocios. “Se pudo comprobar que muchos jóvenes consideraban el autoempleo como una opción a futuro”, explica la Fundación Romero. Además, el año pasado mediante el concurso ‘Para quitarse el sombrero’ se aceleraron 25 de 1.060 proyectos emprendedores presentados por estudiantes de entre 18 y 35 años de ocho regiones.
Este año ya postularon 1.500. Para completar la propuesta, se ha creado el portal sobre emprendimientos Mass.pe, que supera las 10.000 visitas diarias. “A medida que existan más personas liderando empresas, se generarán más alternativas de empleo y, por tanto, desarrollo para miles de familias que aún no pueden salir de la pobreza”, dice la fundación.
Para incrementar el ingreso y la empleabilidad futura, Cosapi también pone énfasis en la capacitación. Con el programa ‘Empleo con Productividad en Ascenso’, iniciado a mediados del 2011, ha ofrecido cursos de 200 horas teórico-prácticas a 3.000 pobladores de sus áreas de influencia en temas de construcción y operación de maquinaria pesada.
Además, de forma lúdica, enseña a los obreros mediante el programa ‘No juguemos a la producción’ las normas de seguridad, y, en la Universidad Corporativa Cosapi, les ofrece la posibilidad de mejorar sus habilidades. De esta manera, la empresa logró disminuir el número de accidentes, neutralizándolos en dos proyectos. “Muchas veces llegamos a zonas remotas, donde existen mucha pobreza, bajos niveles de educación y altos niveles de mortandad infantil. Nuestro período de permanencia en la mayoría de los casos es corto, pero nuestro objetivo es dejar huella porque sabemos que podemos volver para otros proyectos¨, manifiesta.
En tanto, Edelnor apoya la formación de electricistas con el Instituto Superior Tecnológico Pachacutec en Ventanilla. “La oportunidad que encontramos fue la creciente demanda de técnicos en electricidad y la escasa oportunidad laboral de los jóvenes locales, cuyo destino parecía ser el de trabajar por ingresos de subsistencia”, cuenta la compañía. Hoy, unos 120 alumnos asisten al instituto y el 95% de los 80 que ya egresaron trabajan para empresas contratistas.
El BCP, por su parte, ha implementado el Programa de Créditos y Becas BCP, que proyecta financiar con tasas del 4% el estudio de pregrado de unos 2.000 jóvenes en los próximos cinco años. Las becas están destinadas a los mejores diez alumnos de cada promoción del último año de secundaria y a estudiantes que hayan interrumpido sus estudios por motivos económicos. La beca incluye acompañamiento psicopedagógico y académico durante toda la etapa universitaria.
Salud
Desde el 2005, Edelnor impulsa el programa ‘Salud para todos’ que, durante una semana cuatro veces por año, ofrece charlas preventivas y atención de 20 especialidades médicas a más de 12.000 personas que no tienen acceso a este servicio. “Contamos con centros a los que acuden más de 800.000 personas al mes. Allí encontramos una gran oportunidad”, apunta la empresa. Esta aprovecha la economía de escala del programa para lograr mayor atención a menor costo.
Backus se ha enfocado en impulsar el consumo responsable de alcohol como parte de su core business. Con ese objetivo, trabaja con las autoridades en sensibilizar a los conductores sobre los máximos permitidos en sangre. Asimismo, creó hablemosdealcohol.com, un dinámico portal con información práctica y preventiva sobre el efecto de las bebidas espirituosas en la salud. Por último, la cervecera se ha propuesto erradicar la venta de alcohol a menores de edad a través de ‘Sumáte +18’, cuyo objetivo es que los vendedores exijan el DNI.
Para evaluar el impacto, Backus visita con un comprador incógnito los puntos de venta. A quien lo exige, lo premian. A quien no, lo invitan a una capacitación, donde lo animan a apropiarse de la consigna. En una segunda visita sorpresa, la cantidad de puntos de venta que solicita el DNI suele duplicarse, cuenta Malena Morales Valentín, directora de desarrollo sostenible y asuntos corporativos.
Otro programa interesante es ‘Pacífico te cuida’, de la aseguradora del mismo nombre. Consiste en la promoción de la atención médica especializada (en pediatría, oftalmología y odontología, entre otras disciplinas) y charlas preventivas en el área rural de Lima, Ica y Cajamarca. En los seis años que lleva aplicándose, más de 10.000 personas han sido beneficiadas. Según Luciana Puente, gerente de responsabilidad social de la compañía, desde el comienzo del programa el gasto per cápita en medicinas pasó de S/. 74 a S/. 36 y la incidencia de problemas respiratorios disminuyó del 32% a 26% en la población beneficiada.
En su opinión, la campaña no solo ayuda a tejer buenas relaciones con los grupos de interés y el Estado, sino también a conocer las necesidades de la base de la pirámide para poder ampliar sus productos. Además, la empresa apoya la gestión sostenible de la Asociación Unámonos en Arequipa, donde se atienden alumnos con síndrome de Down. Y, con la Asociación Civil Misión Caritas Felices auspician un programa de operaciones gratuitas de labio leporino en dos clínicas en Lima, que ha beneficiado a 280 pacientes. En el país, el programa ha contado con el respaldo de varias empresas y beneficiado a 990 pacientes.
Nutrición
Con la meta de contribuir a la reducción de la desnutrición, Alicorp impulsa el programa “La Radio Saludable”, que difunde mensajes educativos sobre nutrición y desarrollo infantil en la población rural. Para ello, entre el 2010 y el 2012, capacitó en el tema y en producción radial a alrededor de 1.000 locutores en ocho regiones del Perú, con el apoyo de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias. Este año, la empresa organizará la segunda edición de un concurso que premia a microprogramas educativos. El tema es “Quinua y Nutrición”.
El año pasado participaron 41 proyectos: 31 en español y 10 en quechua. Según una encuesta elaborada por la compañía a 180 pobladores de tres regiones de la sierra donde se emite, el 73% dijo haber obtenido información sobre nutrición materno-infantil en su localidad. Antes, solo la obtenían cuando se informaban tragedias por desnutrición.
Además, desde octubre pasado, junto con nueve empresas del sector alimentos y bebidas, promueven y financian las actividades de la Asociación Perú Vive Bien. La institución busca generar mayor conocimiento en la población sobre nutrición, vida saludable y buenos hábitos alimenticios. Como primera iniciativa, el colectivo se ha propuesto potenciar el programa en nutrición e higiene “Crecer Bien” que la multinacional Nestlé implementa hace cinco años en 120 colegios públicos de Villa El Salvador, el Rímac, El Agustino y San Juan de Lurigancho.
Desde hace poco más de un año, la Asociación Sodexo por el Desarrollo Sostenible aplica en los servicios alimentarios (comedores y quioscos) de tres colegios en Lima y dos en Iquitos la campaña ‘Buena Alimentación y Ecoeficiencia’ con la Cámara de Industria y Comercio Peruano – Alemana y la Cooperación Internacional Alemana (GIZ). 6.618 alumnos ya participaron y 343 docentes fueron capacitados en la mejora de hábitos nutricionales y prácticas de ecoeficiencia.
Hasta ahora, el 89% de los docentes incrementaron sus conocimientos en segregación ecoeficiente de residuos e instalación de biohuertos. El 78% de los alumnos los mejoró en cuestiones nutricionales y su opción por productos saludables en los comedores se incrementó en 20%. En estos, la oferta de productos saludables aumentó de 40,6% al 65,8% y la aplicación de prácticas ecoeficientes y de buenas prácticas de manufactura, de 11,0% al 59,9%.
