David Reyes
Enviado especial a México
dreyes@diariogestion.com.pe
“Te voy a quitar ese teléfono y lo voy a lanzar por la ventana”, me dice Hernán Rincón –y su voz de locutor de radio resuena–, cuando nota que voy a grabar la entrevista con un iPhone. La competencia, definitivamente, está en todos lados, incluso en la presentación en el DF de Windows 8, un sistema operativo táctil que no le huye al teclado y al ratón y que, según sus creadores, revolucionará el mercado de software y hardware a nivel mundial.
Durante su exposición, el presidente de Microsoft en América Latina ha insistido en que se trata de una “reinvención” del clásico Windows, desde su pantalla de inicio, ahora muy similar al de una tablet. Detrás, hay un hecho insólito: por primera vez, 16 millones de usuarios ‘testearon’ el producto y le dieron a su creación un carácter social. El resultado es un entorno virtual que es perfectamente compatible con un ordenador de escritorio, una tablet y un smartphone, y que podría cambiar la manera de fabricar y entender los equipos.
Los usuarios, quienes contribuyeron a su desarrollo, serán, por supuesto, los principales beneficiados.
¿A quiénes le permitió Microsoft ‘testear’ el producto?
La mayor parte de las personas que hicieron las pruebas de Windows 8 fueron consumidores, pero también hubo desarrolladores. Las empresas, que tienden a ser un poco más conservadoras, no le permitieron a sus empleados probarlo tanto. Pero los consumidores sí lo adoptaron completamente y empezaron a usarlo desde enero de este año, haciéndonos llegar todas sus inquietudes.
¿Desde cuándo vienen elaborando el concepto de ‘one experience’ de Windows 8, a través del cuál van a integrar en un solo sistema todos los dispositivos?
Desde hace muchos años, cuando nos dimos cuenta de que las tecnologías estaban creciendo de manera divergente y que los consumidores tenían que aprender a usar diferentes interfaces para los diferentes equipos: computadoras, tablets y celulares. Encontramos que el consumidor estaba diciendo: “por favor, simplifiquen”. Nosotros empezamos ese proceso y, por eso, Windows 8 y Windows Phone 8 son muy similares, lo que facilita su uso.
¿Cuál es la expectativa de ventas de Windows 8 y de Microsoft en la región?
América Latina es la región en donde Microsoft se ha expandido más en los últimos años, debido al crecimiento económico que ha tenido y a la expansión de la clase media, que ahora compra televisores, computadoras, equipos electrónicos, etc. Por eso, nuestra proyección es realmente optimista.
En cifras, ¿cuánto optimismo hay para este año?
Mucho más que el del año pasado. El crecimiento del PBI de América Latina va a ser de alrededor de 3.5%. Normalmente la demanda por tecnología crece el triple, es decir, lo hará entre 10% y 12%. Nosotros, en Microsoft, estamos creciendo hasta tres veces eso, a cifras muy altas.
A nivel mundial, ¿la crisis tendrá un impacto en el consumo de tecnología?
Sin duda alguna. La situación económica no es tan buena como lo fue hace algunos años. Europa tiene problemas y eso impacta en el mundo. Afortunadamente, en América Latina, la mayoría de países tomó las medidas adecuadas hace unos años. Tras controlar la inflación y reducir la deuda externa, han logrado afrontar mejor este cambio.
Entonces, ¿no habrá una reducción en las ventas?
Si la hay, será temporal.