Brasilia (Reuters).- El nuevo presidente ejecutivo de la petrolera brasileña controlada por el Estado Petrobras dijo ayer que la firma recibió en los últimos días ofertas por una participación en su unidad de combustibles BR Distribuidora SA.
Pedro Parente no dijo quién hizo las ofertas o la cantidad que Petrobras busca por la unidad. El hizo las declaraciones a la cadena de noticias GloboNews en su primera entrevista televisiva desde que asumió el cargo el 1 de junio.
Parente dijo previamente que Petrobras debe acelerar un plan de desinversiones por US$ 14,000 millones para vender campos, sistemas de distribución, unidades de procesamiento de hidrocarburos, centrales eléctricas y otras operaciones que generan ganancias menores que su negocio principal de producción de crudo y gas mar adentro.
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Sin las ventas, sostuvo, Petrobras no logrará un gran avance en su campaña para recortar su deuda de US$ 130,000 millones, la mayor de la industria petrolera. Tampoco podrá costear el desarrollo de nuevos descubrimientos, que se encuentran entre los más grandes del mundo.
Parente dijo que no ha discutido la venta de su participación en Braskem SA, la mayor empresa petroquímica de América Latina, un activo que muchos creen que será ofrecido. Petrobras es el segundo accionista más grande de Braskem.
Parente fue designado por el presidente interino de Brasil, Michel Temer, con la tarea de generar un cambio en la petrolera más endeudada del mundo, que ha sido golpeada por un creciente escándalo de sobornos y corrupción política.
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La reactivación de la inversión en Petrobras, responsable de aproximadamente el 10% del PBI de Brasil, es clave para la meta de Temer de poner fin a la recesión que atraviesa el país.
Parente también dijo que la investigación sobre el caso de corrupción que afecta a la compañía continuará con el respaldo total del directorio, destacando que solo una minoría de los empleados de Petrobras fue responsable de la trama de sobornos. La amplia mayoría, sostuvo, son trabajadores honestos.
