El Fondo Mivivienda (FMV) está trabajando con nuevas entidades financieras, con el fin de que incorporen a su portafolio los productos Mivivienda, informó el presidente del Directorio del Fondo Mivivienda, Alex Niezen.

“Se espera que en abril próximo, cuatro cajas municipales inicien esfuerzos y empiecen a colocar los productos Mivivienda”, comentó.

Asimismo, indicó que el Fondo Mivivienda tiene los suficientes recursos financieros que garantizan las colocaciones crediticias para las familias de los segmentos medio y medio bajo de la población,

Recientemente, el Fondo Mivivienda colocó en el extranjero S/ 1,500 millones en bonos corporativos en soles a siete años, representando la emisión en moneda local más grande realizada por un emisor corporativo peruano, así como la reapertura de bonos en dólares con vencimiento 2023 por US$150 millones a una tasa de 3.5%.

“Ha sido un hito histórico para el Fondo, convirtiéndonos en la primera empresa peruana que emite en soles en el extranjero y nos convierte en el primer emisor no soberano que coloca bonos en el formato Global Depositary Notes (GDN)”, señaló Niezen.

Explicó que la ventaja del formato GDN es su base de inversionistas a la que se puede acceder, facilitando al inversionista extranjero el proceso operativo para participar en el mercado de capitales peruano.

Precisó que la demanda total fue de S/ 2,280.2 millones, es decir 1.52 veces lo colocado.

“Esta transacción ha establecido un precedente para que otras compañías aspiren a colocar soles en los mercados internacionales. Esta operación ha sido destacada por la prensa especializada internacional como Latin Finance, Global Capital, Business Intelligence, entre otros”, sostuvo.

El funcionario manifestó que este esfuerzo complementa el trabajo del Gobierno de fomentar la vivienda social en el país.

“Para este año se ha presupuestado inicialmente S/ 465 millones para los subsidios del programa Techo Propio”, anotó.

En otro momento, remarcó que el FMV focalizará los recursos hacia los segmentos medio y medio bajo de la población con capacidad de ahorro, buscando su formalización y, por consiguiente, el acceso e inclusión al sistema financiero.

De igual modo, exhortó a las empresas inmobiliarias adecuarse a los nuevos rangos del Bono del Buen Pagador que refleja la realidad demográfica del país y la demanda efectiva de la población.