El panorama del sector inmobiliario en un futuro inmediato sigue siendo poco promisorio. Según cifras de ADI Perú (Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios), este año solo se logrará vender unas 17,000 viviendas, cifra similar a la del año pasado.

En el primer semestre de este año, el sector cayó un 24% pues solo se vendieron unas 4,728 viviendas. En este periodo las ventas en el segmento D crecieron 125% y en B1 24 , mientras que en los segmentos C2 y A1 cayeron 37 y 33%, respectivamente.

Asimismo, la asociación gremial informó que, entre julio del 2014 a junio de este año, se vendieron unas 9,171 viviendas. “En el interior del país se debe estar vendiendo menos que Lima, hay mucha menos estadística, no debería estar superando las 7,000”, indicó Gustavo Rizo Patrón, presidente de ADI Perú.

Para el líder gremial, el sector inmobiliario recién se reactivará en el segundo semestre del 2016, luego de la turbulencia electoral, y en todo el 2017, en base de medidas como el incremento de cobertura del Fondo Mivivenda para créditos hipotecarios, la aplicación del bono del buen pagador a la cuota inicial, el inicio del otorgamiento de certificados de zonificación en Carabayllo y Lurín, y la ley de Leasing Inmobiliario.

“El sector privado le anunció al gobierno central que este problema se venía en marzo del 2013. Desgraciadamente, el desembolso de créditos Mivivienda se ve un año más tarde y el Estado tomó conciencia de cifras cuando su colocación de créditos cayó en el 2014”, indicó.

Construcción
El INEI dio a conocer hoy que el sector construcción se contrajo un 13.56% en mayo de este año, una de las tasas más bajas desde el 2001.

“En el tema de construcción, la realidad tiene tres grandes patas: la construcción de infraestructura, del desarrollo inmobiliario y la construcción ligada al sector minero”, explica Rizo Patrón.

“A fin de año, la cifra de construcción puede ser neutra. Ojalá sea 0% porque vamos partiendo con una cifra fuerte negativa de los primeros seis meses”, agregó.

Dato

• Existen unas 16,000 viviendas no vendidas, en stock, que datan de un poco menos de dos años.