Bruselas (AFP).- ¿Mayor unidad o varias velocidades? El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, desvela este miércoles sus planes para un futuro del bloque sin Reino Unido, la primera marcha de un país en casi 60 años de proyecto europeo.
“El ‘libro blanco’ de Juncker es el certificado de nacimiento de la UE a 27”, estimó una fuente europea, para quien los diferentes escenarios planteados deben contribuir al debate de cara a la cumbre de Roma prevista el 25 de marzo para conmemorar el 60º aniversario de vida en común.
Para esta fuente, Roma representará “una celebración de cumpleaños, pero también el inicio de un debate muy organizado sobre una serie de opciones específicas”. “Esperemos que los líderes tomen [este documento de unas 12 páginas] como una contribución positiva”, dijo.
Tras discutir con el resto de comisarios europeos el martes y el miércoles, Juncker explica a partir de las 15H00 (14H00 GMT) ante el pleno de la Eurocámara reunido en Bruselas su libro blanco, con el que espera “salvar las distancias entre lo que los europeos quieren y lo que la UE puede ofrecer”, según estas fuentes.
Los británicos decidieron en un referéndum celebrado el 23 de junio abandonar la UE, lo que supuso un nuevo golpe a un bloque debilitado desde la crisis financiera de 2008, así como por la crisis migratoria y los atentados yihadistas de los últimos años.
Londres todavía no ha comunicado oficialmente esta decisión, que daría paso así a hasta dos años de complicadas negociaciones de divorcio, aunque ha mostrado su intención de notificarla antes de finales de marzo. El tercer mes de 2017 será así clave para los todavía 28 socios.
¿Varias velocidades…?
En un contexto de auge de la ultraderecha antieuropea en la UE, de elecciones claves en países fundadores del proyecto europeo como Francia (abril-junio) y Alemania (septiembre), y de dudas sobre el apoyo del tradicional aliado europeo, Estados Unidos, la idea de una Europa a varias velocidades está ganando fuerza.
Esta opción, en virtud de la cual cada país de la UE podría escoger su margen de integración con sus socios, ya ha sido evocada por Juncker, así como por otros líderes europeos, en varias ocasiones, la última de ellas el pasado jueves en un debate con universitarios en Bélgica.
“Aquellos que están de acuerdo para hacer un mayor número de cosas juntos, que se pongan de acuerdo sobre lo esencial a hacer, ya sean 15 o 28”, indicó el también ex primer ministro luxemburgués, como una opción para superar las diferencias que bloquean a menudo algunos proyectos europeos.
En esta línea, a principios de febrero, ya plasmó en una entrevista a una radio alemana las crecientes distancias entre algunos países del este y del oeste de Europa. “¿Húngaros y polacos quieren exactamente lo mismo que alemanes y franceses? Tengo grandes dudas”, aseguró el presidente de la Comisión.
¿…o una Europa federal?
El presidente francés, François Hollande, parece haber tomado buena nota del llamado de Juncker e invitó a una reunión el próximo lunes en Versalles a los mandatarios de Alemania, Angela Merkel, Italia, Paolo Gentiloni, y España, Mariano Rajoy, para abordar el futuro de la UE.
Estos países ya forman parte de la zona euro y del espacio de libre circulación Schengen, pero además se muestran partidarios, sobre todo en el caso de Alemania y Francia, de avanzar en determinados asuntos, como el de una mayor cooperación militar en el seno del bloque.
La opción de una UE a varias velocidades debería formar parte de los cuatro o cinco escenarios del ejecutivo comunitario, que podrían ir desde mantener la situación actual hasta avanzar hacia un proyecto de una Europa federal, pasando por terminar de construir el mercado único europeo.
“Presentar sólo cinco opciones sobre el futuro de la UE, sin indicar claramente una preferencia o una dirección política sería un error”, dijo a la AFP el jefe de filas de los socialdemócratas en la Eurocámara, Gianni Pittella, quien urgió a Juncker a enfrentar el “inmovilismo de los gobiernos con una opción política fuerte para el futuro de Europa”.