(Bloomberg).- En el mundo de la minería, el cobre es el metal industrial más buscado.
China tiene escasez de él, las minas que forman la espina dorsal de la oferta actual están envejeciendo y los pocos yacimientos nuevos están ubicados en lugares alejados como Mongolia.
“A todo el mundo le gusta el cobre porque no hay tanta cantidad de él”, dijo Menno Sanderse, analista de minería de Morgan Stanley.
Y, sin embargo, las compañías mineras que desde hace mucho están interesadas en los activos de cobre se han visto frustradas por un sector industrial controlado por un puñado de actores. Hasta ahora.
La noticia de que los productores Antofagasta Plc y Teck Resources Ltd. analizaron una posible operación indica que las compañías podrían estar buscando la manera de romper el impasse. Ambas dijeron que actualmente están en conversaciones sobre una fusión.
“Las oportunidades de fusión son reales”, declaró Paul Espie, director gerente del grupo de capital riesgo especializado en minería Pacific Road Capital, que posee US$ 800 millones en activos, en una entrevista que tuvo lugar el martes en Santiago.
“Es un momento interesante porque las valuaciones están bajas. Estamos estudiando la situación de la fusión en Chile en estos momentos”.
Comprar versus construir.
La escasez de nuevos yacimientos de cobre, la caída de la calidad en minas de Chile, Estados Unidos, Australia e Indonesia y los costos desmedidos para desarrollar proyectos se combinan para que resulte más atractivo comprar un rival que construir una mina nueva.
El primer catalizador que permite abrigar esperanzas de una fusión más amplia es una caída de 17% en los precios en los últimos dos años, que ha hecho que los productores vulnerables estén más baratos.
Sin embargo, hay diferentes opiniones sobre la forma en que la recuperación de los precios ayudaría a los compradores a adquirir las compañías en que han puesto sus ojos.
“No veía esta divergencia entre los alcistas y los bajistas desde hace una década”, destacó Paul Robinson, director de la consultora CRU Group de Londres, el 30 de marzo.
Las posibilidades de fusiones y adquisiciones fueron tema de conversación en la reunión anual de la industria que tuvo lugar en Chile esta semana, la más grande del sector del cobre y a la que asistieron más de 3,000 ejecutivos, operadores y banqueros.
Para Rio Tinto Group, la segunda mayor compañía minera del mundo con activos de cobre en los Estados Unidos, Mongolia e Indonesia, el obstáculo que dificulta las transacciones son las costosas demandas de los vendedores.
“Seguiremos teniendo una postura oportunista respecto de las fusiones y adquisiciones pero hoy no es nuestra prioridad”, señaló Jean-Sebastien Jacques, responsable de cobre de la empresa, en una entrevista celebrada en Santiago el miércoles.
“Habrá que pagar un precio alto por cualquier activo de buena calidad. Los buenos activos no son fáciles de encontrar. No creo que la cuestión se plantee entre construir y comprar. Va a pasar por construir y comprar alguna cosa”.