Liliana Ortiz tiene un hijo de diez años de edad, es madre soltera y vive con su padre en San Miguel. Hace casi seis años empezó como mesera y luego capitana –jefa de meseras– en Crepes & Waffles (C&W) en el primer local de San Isidro, y hoy es una de las colaboradoras con mayor antigüedad en el local de Miraflores.