Por Carlos Ledesma
Economista y profesor de banca y empresariado de la USIL
Suelo referirme, en mis clases de Banca, a las Cajas Municipales de Ahorro y Crédito como instituciones ejemplares dentro del sistema financiero nacional. Desde su creación en la década de los ochenta, estas empresas financieras, han dado muestras de eficiencia y técnica suficiente para cumplir los objetivos con que fueron creadas.
En 1982 con la colaboración de la Cooperación Técnica Alemana nació la Caja Municipal de Ahorro y Crédito de Piura. Las Cajas –CMAC- nacieron apoyadas por las Municipalidades Provinciales de sus respectivas localidades, como un único accionista. En la actualidad el sistema de Cajas Municipales está conformado por 12 instituciones, que sumada la Caja Municipal de Crédito popular de Lima cuyo nacimiento se remonta a 1947, sumarian 13 instituciones.
A raíz de la intervención por parte de la Superintendencia de Banca y Seguros a la CMAC de Pisco, he recibido comentarios de parte de ex-funcionarios del ente supervisor de que esto podría, sin tener un efecto sistémico, convertirse en una seguidilla de correcciones al interior del sistema de Cajas Municipales.
He leído con suma preocupación una noticia que considero contiene una aseveración poco acertada. Esta noticia del 27 de mayo indica que el Presidente de la Federación de Cajas Municipales habría indicado que uno de sus agremiados, la CMAC de Paita hizo un aporte de capital de 10 millones de soles en terrenos para aumentar su patrimonio, con los cual habría superado el límite exigido por el regulador. Esta noticia genera desconcierto, pues es sabido que los aumentos de capital en el Sistema Financiero peruano solo pueden ser realizados con dinero en efectivo.
Asimismo, tan importante como contar con un patrimonio adecuado es realizar una labor eficiente en la asignación de los recursos, y sobre todo, en el manejo de los depósitos del público. Esto se mide con el ratio de morosidad. El ratio de morosidad refleja la calidad de cartera crediticia de las instituciones y está formado por la relación entre la Cartera Atrasada (Créditos Vencidos + Créditos en Cobranza Judicial) sobre el Total de Colocaciones.
Si analizamos el cuadro notaremos que el promedio de morosidad del Sistema de Cajas Municipales es de 6.67%, ratio de por si elevado. Sin embargo, alguna de las Cajas presentan un ratio de Morosidad por encima del promedio, tal es el caso de la CMAC Ica con 8.23%, Maynas con 7.96%, Pisco con 9.65% y, encima de ellas, la CMCP de Lima con 12.41%, la CMAC de Paita con 12.90% y la del Santa con 16.84%, ratios sin duda preocupantes.
Al respecto, hemos encontrado que Class & Asociados, Clasificadora de Riesgo otorga a las CMAC de Paita y del Santa, la clasificación D+, la misma que otorgaba a la intervenida y liquidada CMAC de Pisco, con la siguiente nota aclaratoria:
“Categoría D: Corresponde a instituciones con una débil fortaleza financiera, la que requiere constantemente apoyo de fuentes externas a la institución, o que requerirá de esta asistencia en un plazo relativamente corto de tiempo. Estas instituciones pueden contener alguno de los siguientes elementos: un cuestionable valor del negocio, algunos indicadores financieros comprometidos seriamente, o el hecho de enfrentar un entorno de negocio muy inestable”.
“Para las categorías de riesgo, Class & Asociados S.A. Clasificadora de Riesgo utiliza la nomenclatura (+) y (-) para otorgar mayor o menor grado de fortaleza financiera relativa”.
Esta calificación dada por Class & Asociados hace algún tiempo que debió llevar al ente supervisor a tomar las medidas correctivas necesarias, se hace indispensable que la SBS tome un accionar más proactivo en resguardo del Sistema.