La administración de Barack Obama está presionando al presidente de China, Xi Jinping, para que colabore en sus esfuerzos por terminar con las amenazas de guerra de Corea del Norte o, de lo contrario, el Gobierno chino verá un aumento de la defensa antimisil estadounidense en la región.
Ayer en la noche, el New York Times reportó que, en una llamada telefónica de Obama a Xi, el Gobierno de EE.UU. resumió en detalle los planes para incrementar el armamento de defensa antimisiles y otros pasos para contener la escalada de retórica bélica usada por líder norcoreano Kim Jong-un.
Hasta el momento, China no ha emitido ningún pronunciamiento público o privado sobre el despliegue de aviones caza estadounidenses en la Península de Corea.
“Ese silencio, según voceros de la administración de Obama, evidencia una creciente frustración de China hacia el Norte y un reconocimiento de que su apoyo hacia Pyongyang podría tensionar su relación con Washington”, se lee en el artículo.
Evolución
Tom Donilon, asesor de seguridad de la Casa Blanca, dijo que el momento en que este intercambio estaba sucediendo era importante. “Es un ejercicio temprano e importante entre China y EE.UU., temprano para el mandato de Xi Jinping y también para el segundo mandato del presidente Obama”, agregó.
A pesar de que los funcionarios estadounidenses dijeron de que Xi ha estado al mando del país solo por algunas semanas y que China tiene un historial de frustrar negociaciones con Estados Unidos respecto a Corea del Norte, Donilon cree que la postura china ha “evolucionado”.
Por otro lado, también hay dudas sobre cuánto apoyo podría darle China a Estados Unidos en este objetivo. Marcus Noland, especialista en Corea del Norte en el Instituto Peterson de Economía Internacional en Washington, dio un ejemplo sobre un reciente viaje a Beijin.
Junto a dos funcionarios estadounidenses, trataron de convencer al Gobierno chino de reforzar las nuevas restricciones bancarias sobre Corea del Norte, pero las autoridades financieras de China se mostraron poco dispuestas a hacerlo.
“Pero tampoco esperaría que lo difundieran”, incluso si es que cambiaran de opinión, agregó Noland.
“Muchos analistas dicen que las sanciones [a Corea del Norte] no pueden tener éxito sin la cooperación china, ya que tiene relaciones de comercio cercanas a Norcorea y ha escogido, en el pasado, el mantener a flote ese gobierno al proveerles combustible y otro tipo de ayuda importante”, señaló el reportaje.