AFP.- La familia del exdictador de derecha peruano Francisco Morales Bermúdez (1975-1980), rechazó el fallo del Tribunal de Roma que lo condenó el martes en ausencia a cadena perpetua por su participación en el llamado Plan Cóndor, por secuestro y muerte de unos veinte ítalo-latinoamericanos.
“Mi padre (95 años) está tranquilo, pero la familia indignada porque aquí se está vejando el nombre de una persona honesta, justa, que sirvió a las Fuerzas Armadas y al Perú, sirvió para institucionalizar la democracia, una indignación total”, dijo Remigio Morales Bermúdez, hijo del exdictador, a la emisora peruana RPP.
Al ser consultado respecto a las medidas que podría adoptar la familia a raíz del fallo, dijo que “lo único que puede hacer es remitirse a los tribunales peruanos y a la Constitución” de Perú.
Remigio Morales recordó que su padre, acompañado de su abogado, acudió a la Fiscalía y a la Corte Suprema de Perú a dar su testimonio, a pesar de no haber sido llamado.
Explicó que mientras que el Plan Cóndor se realizaba en una parte de Sudamérica, Perú estaba en pleno proceso de regreso a la democracia, “se había elegido una Asamblea Constituyente y se preparaba para unas elecciones generales, a diferencia de las dictaduras de la región”.
“Perú nunca estuvo en el Plan Cóndor y si mi padre fue incluido en el proceso de Roma fue porque circunstancialmente era presidente cuando dicha operación era ejecutada en los otros países”, dijo. El militar en retiro también negó que Perú haya participado en esa operación.
Mediante el Plan Cóndor las dictaduras sudamericanas pedían a otras la captura y en algunos casos la eliminación o la extradición de enemigos políticos secuestrados, siempre fuera de los parámetros que establecía la ley. En algunos casos, militares de dos países participaban juntos en operativos y torturas.
En el 2007 la justicia italiana pidió la extradición del expresidente peruano de facto y su captura junto a miembros de su Junta Militar por la desaparición de 20 italianos a causa del Plan Cóndor. El pedido no fue aceptado por la justicia peruana.
Morales Bermúdez encabezó un golpe de estado en 1975 con el que derrocó al dictador izquierdista Juan Velasco Alvarado (1968-1975), luego en 1979 convocó a una Asamblea Constituyente para elaborar una nueva Carta Magna y al año siguiente llamó a elecciones generales, siendo elegido el arquitecto Fernando Belaúnde Terry.
El actual congresista del grupo de izquierda peruano Frente Amplio, Justiniano Apaza, quien fuera deportado durante la dictadura de Morales Bermúdez a Argentina, gobernado por un régimen miliar, calificó el fallo de “histórico”.
“Es una condena justa, porque él fue un tirano como (Augusto) Pinochet, exdictador de Chile. Ahora solo queda reivindicar a los que fuimos deportados por reclamar que se cumpla con respetar la democracia”, dijo al diario El Comercio.