París (AFP).- El primer ministro francés, Manuel Valls, anunció hoy que decidió recurrir a una disposición de la Constitución que le permitirá imponer la polémica reforma laboral promovida por su gobierno sin someterla a la votación del parlamento.
“Este país está demasiado acostumbrado al desempleo masivo”, dijo Valls ante la Asamblea Nacional, aseverando que está actuando en favor del “interés general” de Francia, y desmintiendo que haya ninguna “intransigencia” en su modo de actuar.
Valls hizo valer que se han añadido más de 800 enmiendas al proyecto inicial al término de un “debate de calidad”, y lamentó que “una alianza de la inmovilidad” haya frenado el ánimo reformista del gobierno.
[ LEA TAMBIÉN: Brexit: Francia pide imponer más restricciones al Reino Unido por su salida de la Unión Europea ]
Horas antes, una fuente política ya había indicado a la AFP que el gobierno socialista había decidido recurrir de nuevo al artículo 49-3 de la Constitución para imponer la reforma.
El gabinete de Valls ya hizo lo mismo en la primera lectura del proyecto, que en los últimos cuatro meses ha dado lugar a un sinfín de huelgas y manifestaciones en toda Francia. Y es que el gobierno no estaba seguro de contar con los apoyos necesarios entre el ala izquierdista del grupo parlamentario socialista.
Dicho recurso supone la adopción del texto, si no se presenta una moción de censura contra el ejecutivo en un plazo de 24 horas. En caso de prosperar dicha moción, el gobierno tendría que renunciar.
[ LEA TAMBIÉN: Alemania, Francia e Italia propondrán un ‘nuevo impulso’ para la UE ]
La oposición de derecha del grupo Los Republicanos hizo saber que no presentará ninguna moción de censura.
El gobierno francés explica que con esta reforma quiere combatir un desempleo endémico -superior al 10%- facilitando los contratos en un mercado laboral más flexible. Los detractores, por su parte, creen que solo aumentará la precariedad laboral.
El anuncio del gobierno tuvo lugar al inicio de la duodécima jornada de movilización social en cuatro meses contra el proyecto de ley laboral.
Los sindicatos que se oponen a la reforma impulsada por la ministra de trabajo Myriam El Khomri convocaron una marcha en el centro de París y en otras ciudades francesas.