(AFP) Un juez de Seattle rechazó liberar a un inmigrante indocumentado mexicano detenido hace una semana por agentes migratorios que quieren deportarlo pese a que un decreto presidencial impide su expulsión, informaron sus abogados.
Mientras decenas de personas protestaban frente a la corte reclamando su liberación, el juez federal James Donohue dijo que Daniel Ramírez Medina, que llegó ilegalmente a Estados Unidos con sus padres a los siete años y hoy tiene 23, puede solicitar una audiencia para pedir fianza ante un juez migratorio, que debe escucharlo en una semana como máximo.
Si en ese plazo no es posible realizar la audiencia, Donohue aseguró que está dispuesto a retomar el caso.
Los abogados de Medina, que reclamaban su liberación, no ocultaron su decepción.
“Seguiremos luchando por la liberación inmediata de Daniel mientras el gobierno prosiga con su detención injustificada e ilegal”, aseguró uno de ellos, Mark Rosenbaum, de la asociación Public Counsel, en un comunicado.
No obstante, la audiencia migratoria expeditada “nos dará una nueva oportunidad para solicitar su liberación”, afirmó.
El gobierno asegura que Ramírez confesó ser integrante de una pandilla. Pero sus defensores dicen que fue presionado para hacer esa afirmación, que el joven -padre de un niño de tres años- no tiene antecedentes penales, nunca cometió un crimen y nunca perteneció a ninguna banda criminal.
“Liberen a Daniel”, “Ningún ser humano es ilegal”, “Paren con las deportaciones; no más familias separadas”, leían algunos carteles de los manifestantes frente a la corte federal de Seattle, según imágenes de la prensa local.
El arresto de un joven protegido por el DACA (Deferred Action for Childhood Arrivals), hecho inédito según sus abogados, plantea dudas sobre el futuro de unos 750,000 inmigrantes que se acogieron a este decreto firmado por el expresidente Barack Obama en el 2012.
El DACA fue creado como una medida temporaria para evitar la deportación de cientos de miles de jóvenes traídos por sus padres a Estados Unidos cuando niños, que vivieron casi toda su vida aquí y están totalmente integrados a la cultura estadounidense.
El presidente Donald Trump quiere deportar a millones de inmigrantes sin papeles, pero el miércoles dijo que tratará el tema “con el corazón”.
“DACA es un tema muy, muy difícil para mí. Es uno de los temas más difíciles que tengo porque hay chicos increíbles” protegidos por el DACA, dijo en una conferencia de prensa.