El presidente francés Emmanuel Macron propuso este martes la creación de una fuerza militar europea de aquí a 2020, en un discurso en el que abogó por un “profunda transformación” de la Unión Europea.

Europa es “demasiado débil, demasiado lenta, demasiado ineficaz”, criticó Macron en su discurso pronunciado en la universidad de La Sorbona (París). “Pero sólo Europa puede darnos la capacidad de actuar en el mundo frente a los grandes desafíos contemporáneos”.

El mandatario francés defendió, entre otras medidas, la creación de una fuerza militar europea de aquí a 2020, con un presupuesto de defensa y “una doctrina común” para actuar, y abogó por instaurar una agencia comunitaria de asilo para lidiar con la actual crisis migratoria.

En el ámbito económico, volvió a proponer dotar a la zona euro de un ministro de Finanzas, un presupuesto y un Parlamento, y pidió una nueva tasa europea contra los gigantes tecnológicos como Facebook y Apple -acusados de pagar demasiado pocos impuestos por sus actividades en Europa-.

Planteó incluso la posibilidad de modificar la Política Agrícola Común (PAC), el enorme programa de subsidio para el sector, que Francia y su poderoso lobby agrícola siempre han defendido.

Alemania
Macron espera que la canciller alemana, Angela Merkel, respalde su agenda reformista, pero sus planes podrían verse perjudicados por los resultados de las elecciones del domingo en Alemania.

La dirigente conservadora deberá formar un gobierno de coalición que incluirá probablemente al partido liberal FDP cuyo líder, Christian Lindner, se mostró en los últimos meses muy crítico con las propuestas europeas de Macron y calificó de “línea roja” la creación de un presupuesto de la zona euro.

Junto con el Brexit y las elecciones alemanas, las propuestas de Macron ocuparán probablemente un lugar destacado en la agenda de la cumbre que los Veintiocho celebrarán el jueves en Estonia.

La cooperación con Alemania -la otra mitad del llamado “motor francoalemán” de la UE- es esencial, aunque Macron también deberá convencer al resto de sus socios europeos.

Responsables franceses consideran que éste es el buen momento para intervenir en el debate alemán, antes de que se forme una coalición y que ésta establezca su hoja de ruta para los próximos cuatro años.

“Es una oportunidad que no podemos dejar pasar”, aseguró un responsable de la presidencia francesa el lunes.

¿Exasperación alemana?
Desde Berlín se observa con mucha atención las partes más espinosas de las propuestas de Macron, entre ellas su deseo de crear un presupuesto común para la zona euro, que tendría a Alemania como uno de sus mayores contribuyentes.

El presidente francés propuso la creación de un impuesto para financiar dicho presupuesto.

Tras la elección de Macron en mayo, Merkel pareció dispuesta a debatir la creación de un pequeño presupuesto común, pero el FDP se opone firmemente a que Alemania gaste más dinero para ayudar a países de la zona euro con dificultades como Grecia.

Las pasadas declaraciones del presidente francés a favor de la instauración de eurobonos también es un tema sensible en Alemania.

“El debate lanzado por el presidente francés se sigue con cierta exasperación en la oficina de la canciller”, escribió el diario conservador Frankfurter Allgemeine Zeitung este fin de semana.

“Habla de soluciones antes de que la cuestión se haya debatido correctamente”, añadió el periódico, que acusó a Macron de “empezar la casa por el tejado”.