(AFP) El gobierno de México denunció la deportación de Estados Unidos de una mexicana interceptada por autoridades cuando acudió a su cita migratoria anual de supervisión, un caso que refleja “la nueva realidad” de los mexicanos que viven en territorio estadounidense, consideró la cancillería.
Los consulados de México en Estados Unidos intensificaron su trabajo de protección a connacionales “previendo el endurecimiento de las medidas migratorias por parte de las autoridades de ese país, así como posibles violaciones a preceptos constitucionales en operativos o faltas al debido proceso”, añadió la Secretaría de Relaciones Exteriores en un comunicado.
El jueves la mexicana Guadalupe García de Rayos fue deportada a pesar de que se encontraba en libertad durante su proceso migratorio, denunció la cancillería.
Fue detenida el miércoles por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Phoenix, Arizona, cuando se presentó en la oficina de esa agencia para cumplir con su orden anual de supervisión, relató la secretaría de Relaciones Exteriores.
Para el gobierno mexicano, ese caso “ilustra la nueva realidad que vive la comunidad mexicana en territorio estadounidense ante la aplicación más severa de las medidas de control migratorio”.
Durante su campaña electoral, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tildó a los mexicanos indocumentados de criminales y violadores.
También insiste en que el muro que quiere levantar en la frontera con Estados Unidos debe ser pagado por México.
Las diferencias por ese muro provocaron que se cancelara un encuentro entre Trump y el presidente de México, Enrique Peña Nieto.
El número de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos se estima en 11 millones, en su mayoría mexicanos.