Moscú (AFP).- El presidente ruso Vladimir Putin anunció hoy un acuerdo de alto el fuego entre el régimen y la oposición armada en Siria, país inmerso en un sangriento conflicto desde 2011, y el lanzamiento de negociaciones de paz internacionales junto a Turquía e Irán.
“Un acontecimiento ocurrió hace algunas horas. No solamente lo esperábamos desde hacía tiempo, sino también hemos trabajado mucho para aproximarnos” al mismo, indicó Putin durante un encuentro televisado con sus ministros de Defensa y Relaciones Exteriores.
“Se firmaron tres documentos: el primero es entre el gobierno sirio y la oposición armada sobre el alto el fuego para el conjunto del territorio de Siria”, señaló, precisando que el segundo versa sobre la puesta en marcha de medidas para controlar el respeto de la tregua.
“El tercer documento es una declaración de la voluntad (de las partes en conflicto) de lanzar negociaciones de paz sobre la solución siria”, subrayó el presidente ruso.
Putin anunció también una “reducción” de la presencia militar rusa en Siria, donde el ejército realiza una campaña de ataques aéreos en apoyo al gobierno de Damasco desde setiembre de 2015, y afirmó que sólo se ataca a grupos yihadistas.
“Estoy de acuerdo con la propuesta del ministerio de Defensa sobre una reducción de nuestra presencia militar en Siria”, dijo.
“Vamos a continuar absolutamente nuestra lucha contra el terrorismo internacional” y “apoyando al gobierno legítimo sirio”, precisó el presidente ruso.
Por su parte, el ministro de Defensa, Serguei Choigu, precisó que grupos que representan a unos 62.000 rebeldes armados firmaron el acuerdo de cese el fuego con el gobierno de Damasco.
“Son las principales fuerzas de la oposición armada”, aseguró.
Por su parte, el jefe de la diplomacia rusa, Serguei Lavrov, anunció el comienzo de preparativos para negociaciones de paz próximamente en Astana, la capital de Kazajistán.
“Comenzamos con turcos e iraníes a preparar el encuentro en Astana”, indicó Lavrov.
Por su parte, Ankara y Teherán manifestaron su voluntad de ser, junto a Moscú, garantes de un eventual acuerdo de paz entre el gobierno sirio y la oposición, que podría ser concluido en Astana.