(Bloomberg) En un rincón escarpado de la costa de España, hay un refugio de estilo modernista blanco donde las habitaciones tienen ventanales de piso a techo que dan al Mediterráneo, y, al borde de piscinas, hay gazebos con laterales de telas vaporosas que se agitan en el viento.
Pero la mayoría de los huéspedes se encuentran muy ocupados. Están aquí para desprenderse de algunos kilos, aprender los secretos de la cocina macrobiótica (¡Mantequilla de nuez! ¡Chía! ¡Espirulina!) y cómo enfocarse mejor, con la ayuda del profesor Bruno y sus exámenes cerebrales con electrodos. Quizás sumen algunos meses a sus vidas, si regresan una y otra vez.
Sha Wellness Clinic es uno de los 24 seleccionados para formar parte de “Zen”, un nuevo programa lanzado por expertos en viajes de Red Savannah, firma que promueve el turismo saludable.
Zen no sólo responde a la demanda de los consumidores, sino a la idea de que viajar puede ayudar a aliviar las enfermedades crónicas y la obesidad, que constituyen amenazas para la salud a nivel mundial.
Si usted se inscribe, la “Gurú zen” del programa lo ayudará a encontrar el spa adecuado para atender sus problemas específicos de salud o estrés. Considérela como un agente de viajes/terapeuta.
Como dice el fundador y máximo responsable fundador de Red Savannah, George Morgan-Grenville: “Crece la longevidad, los costos de atención de la salud están por las nubes, el estrés es omnipresente y aumenta la inmunidad a los antibióticos. La gente comienza a vislumbrar la inminente bomba de tiempo para la salud”.
Sostiene que utilizar el tiempo libre de manera constructiva -concentrándonos en nuestro bienestar físico, mental, espiritual y emocional- puede ayudarnos para “enfrentar lo que el futuro nos depare”. En otras palabras, considera que el viaje al bienestar es la clave de una vejez saludable.
Morgan-Grenville no es el único que piensa esto. El turismo de salud se ha convertido en una industria que factura US$ 678,500 millones al año, repleto de tendencias que van y vienen, cada una más extravagante que la otra. Pero en muchos casos las ganancias son tan importantes como la mejora de los problemas de la salud, si no más.
Es por esto que Morgan-Grenville contrató a tiempo completo a la “Gurú zen” para determinar cuáles refugios ameritan la inversión y cuáles no. Después de tres meses de investigación y consultas con expertos en salud y bienestar, la ex asesora de viajes Samantha Gee vivió con el equipaje a cuestas de junio a septiembre, estudiando los centros turísticos de bienestar más innovadores y elogiados del mundo. De su lista inicial de 60 centros, quedaron 22, que hoy comprenden la cartera de resorts de bienestar zen.
Desde la comodidad de su oficina en Gloucestershire, en el Reino Unido, Gee ahora asesorará a viajeros que buscan una “receta de viaje” que cure sus dolencias crónicas.
Aunque Gee no es una médica profesional, utilizará su propia experiencia, así como conversaciones sinceras, para discernir qué programa es mejor para cada viajero, según su personalidad, estilo de vida y metas de salud, y no según su destino de ensueño. Es un abordaje progresivo, una novedad en el sector.
¿Tiene un problema que le gustaría que ella solucionase? A continuación, algunas de las dolencias más comunes que Gee procura aliviar, y su prescripción de viaje preferida para cada una de ellas.
Necesito desenchufarmeReceta de viaje: unos días en Eremito, Umbria, Italia.
“Es un retiro monástico hermoso, que cuenta con 14 habitaciones en medio de 3000 hectáreas de reserva natural. Da a un valle que es sólo verde y ríos, uno de los lugares más serenos y conmovedores en los que he estado.
No hay wi-fi, la señal de teléfono es escasa y todas las noches cenamos en silencio, lo cual fue la experiencia más relajante que haya vivido. Con caminatas, yoga, un libro, o simplemente sentada contemplando el paisaje, una se desconecta completamente. Yo iría una semana, pero hay quienes no quieren más de tres días”.
Me gustaría bajar algunos kilosReceta de viaje: una estadía con un plan de alimentación en Sha Wellness Clinic, a las afueras de Alicante, España.
“La alimentación es algo muy importante en este lugar. Al llegar, tiene una consulta con un médico de rejuvenecimiento y una enfermera, que evalúan el menú que se le proporcionará; tienen tres que varían en intensidad, todos basados en la dieta macrobiótica.
Las comidas son toda una experiencia, donde cada detalle está presentado con gran belleza. Hay tres platos en la cena y dos o tres en el almuerzo. Y dan clases de cocina realmente muy buenas, en las que se puede aprender cómo preparar comida macrobiótica. Quieren que usted pueda lucirse también en casa”.
Busco un rejuvenecimiento espiritualReceta de viaje: un refugio remoto en Ananda, en el Himalaya, India.
“Siempre se menciona el Himalaya como un lugar maravilloso, y realmente lo es. Una se siente un poco distinta allí y puede volver renovada. Solo se necesitan unos días para sentirse como nuevo. Combinan yoga y Ayurveda para realmente rejuvenecerlo.
Y en Ananda, la experiencia espiritual se enriquece porque lo traen a la comunidad, puede unirse a los lugareños en la ceremonia Ganga Aarati, en la que cantan y ponen toneladas y toneladas de lámparas encendidas con mechas empapadas en alcanfor en las márgenes del río para sentirse en unidad con los elementos. Es espectacular”.
Mi sistema digestivo necesita atenciónReceta de viaje: una escapada de una semana a Parkhotel Igls, en Insbruck, Austria.
Mucho se habla en la prensa sobre crear y mantener un microbioma saludable en el intestino. Austria es el hogar del Método Mayr (también llamado Cura Mayr), que constituye una práctica increíblemente estricta para curar todos los problemas digestivos.
Parkhotel Igls es también un lugar muy confortable para intentarlo. Cuenta con una gran piscina interna, bellos jardines y un fantástico gimnasio con vistas panorámicas de Innsbruck y de las montañas detrás.
Tienen tres doctores permanentes, los cuales, me informaron, se capacitaron en medicina tradicional de Occidente antes de convertirse al Método Mayr. Usted tendrá una dieta muy restringida, con suplementos específicamente recetados, y se le enseñará cómo comer –sobre todo, cómo masticar-.
¡Recomiendan masticar 40 veces cada bocado! No es divertido pero sí una manera de mejorar sustancialmente su salud.
He aquí otras recetas de viajes:
Para desintoxicarse: un retiro ayurveda en Kalari Kovilakom, en Kerala, India.
Para ponerse en forma: un viaje rápido a Absolute Sanctuary, en Koh Samui, Tailandia.
Para consentirse: Rosa Alpina, en Las Dolomitas de Italia.