El ministro de Economía y Finanzas Alfredo Thorne dijo, durante su presentación en el Acuerdo Nacional, que para construir un crecimiento sostenible, inclusivo y equitativo es indispensable emprender reformas estructurales que aseguren el crecimiento de la inversión privada.
“Hoy es necesario poner foco en las clases medias y en los círculos virtuosos que el impulso de la formalización de la economía generará en la producción, empleo, crédito y protección social”, resaltó.
En esa línea, mencionó que el esfuerzo pasa por formalizar nuestra economía, pues la informalidad en la que hoy vivimos afecta sustancialmente la productividad, que no es otra cosa que la capacidad que tenemos los peruanos y peruanas de generar valor para nuestra sociedad y economía.
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“Encontramos que las empresas más pequeñas y más informales son la mitad de productivas que las grandes; y que los ciudadanos que trabajan en la informalidad ven también afectadas sus capacidades para enfrentar los riesgos de salud y vejez”, sostuvo.
Por ello, es importante – comentó Thorne – distinguir entre estas dos realidades, la de quienes son (i) informales por escape (2.7 millones de pymes) y aquellos que son (ii) informales por exclusión (8.9 millones de independientes y microempresarios) para entender la complejidad de este fenómeno y evitar desplegar esfuerzos que no resuelvan los problemas reales que enfrentan los peruanos.
En su opinión, no basta con mejorar la productividad del trabajador, en algunos casos, es importante hacer la regulación más eficiente y adecuarla a las realidades de las diferentes empresas.
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El titular del MEF destacó que tras conversar sobre la importancia de disminuir los costos de la formalidad e incrementar los beneficios, se comprometen en trabajar por un mayor acceso a crédito, que en el ministerio llaman la “revolución del crédito”, a través de un cambio de estrategia en instituciones financieras del Estado para facilitar financiamiento de micro y pequeña empresa.