El liderazgo tiene que ver con las personas y si los líderes empiezan a perder el contacto con aquellos a quienes dirigen pueden perder respaldo e incluso su marca personal podría resultar afectada.
Ahora estos orientadores tienen que prepararse ante nuevos requisitos. Uno de éstos es que deben tener una mayor inteligencia emocional para que puedan conectarse de forma más intuitiva con sus empleados. Deben aprender a escuchar más, tienen que ser facilitadores de oportunidades y entrenadores excepcionales.
En esa línea, hay algunas cosas, de sus líderes, que los trabajadores demandarán con énfasis en el 2014, según una reciente publicación de Forbes:
Una identidad sólida
Los líderes deben consolidar su identidad. Muchos líderes hacen que sea difícil que sus colaboradores puedan seguirlos porque carecen de originalidad y coherencia. Los líderes sin identidad propia no logran conocerse a sí mismos y por lo tanto carecen de la inteligencia emocional necesaria para conectarse con sus empleados de manera significativa.
Sentido de urgencia
El mercado cambia rápido y su líder no puede caer en la complacencia. Los líderes deben tener un sentido de urgencia para asegurar que su visión se mantenga por delante de las demandas del mercado. No se debe confundir el sentido de urgencia con la necesidad de mantener al equipo ocupado.
El aumento de la colaboración
Los grandes líderes saben que su éxito depende en gran medida de otros. Ellos saben que deben mejorar su capacidad de guiar, inspirar y motivar a sus subordinados directos. Son conscientes de que tienen que promover el trabajo en equipo dentro de su organización.
El liderazgo de ideas
Un líder es una persona que identifica tendencias, temas comunes y patrones dentro de una industria en particular. Para esto se requiere ser original en la forma de pensar y, expresar un punto de vista de manera que pueda despertar el interés de otras personas.
Involucramiento
Los líderes en el siglo 21 tienen que ser más emprendedores que nunca. Ellos necesitan ver su departamento como una pequeña empresa donde están constantemente buscando maneras creativas, ingeniosas y rentables para crecer y competir de forma rentable. Esto requiere que los líderes toquen el negocio, o sea, se ensucien las manos.
Exploradores apasionados de nuevas posibilidades
Los líderes tienen que dar rienda suelta a su apasionada búsqueda de la excelencia con el fin de desafiar el status quo y aprovechar las oportunidades nunca antes vistas para propiciar avances en el lugar de trabajo.