Shanghái (Reuters).- China realizará una serie de reformas económicas y financieras en los próximos cinco años, lo que ayudará a que el yuan sea una moneda internacional para el 2020, dijo el gobernador del banco central, Zhou Xiaochuan.
Las reformas también incluirán la mejora de las comunicaciones del banco central y guiar las expectativas del mercado para mejorar la política monetaria, escribió Zhou en el artículo publicado en el sitio de internet de la revista Caixin.
Zhou dijo que el Gobierno fortalecerá la supervisión de su sistema financiero para evitar un “riesgo sistémico”, explicando el decimotercer plan económico quinquenal de China propuesto para el período 2016-2020.
Los comentarios sobre las prioridades políticas llegan en medio de la inquietud en los mercados globales sobre el compromiso de China para llevar a cabo unas reformas financieras integrales.
Esas dudas se desataron después de que Pekín intervino en los mercados de valores durante un desplome del precio de las acciones que comenzó en junio y que llevó al índice compuesto de Shanghái a caer hasta un 40%.
China también intervino en el mercado de divisas después de que una devaluación abrupta del banco central en agosto generó preocupaciones sobre el valor futuro del yuan.
Zhou dijo que China fomentará nuevos mecanismos para promover la liberalización financiera y el desarrollo, así como “mejorar la eficiencia del sistema financiero al servicio de la economía real”.
“(China) utilizará y desarrollará herramientas de control de riesgos financieros y reducirá los niveles de apalancamiento a fin de evitar el riesgo sistémico”, dijo.