¿Cuándo fue la última vez que luchó, sin éxito, para concentrarse en una actividad aburrida o complicada? Probablemente, sentía como si hubiera perdido la capacidad de concentrarse y no sabía cómo recuperarla. Todos pasamos por eso algunas veces.

Incluso en esos momentos, en los que siente como si estuviera batallando contra usted mismo, es posible recuperar la concentración. Solo deberá ‘ajustar’ su fuerza de voluntad. Para Kelly McGonigal, psicóloga de la Universidad de Stanford, “la fuerza de voluntad es como un músculo que necesita ejercitarse, desarrollarse y mantenerse”.

La autora de “The Willpower Instinct” lo define como algo que da “energía y resistencia para hacer frente a los desafíos. La habilidad de perserverar ante los contratiempos, y la fuerza para tolerar las tensiones que, de otro modo, podrían hacer que nos escaparamos de las metas o proyectos que nos importan”.

Cualquier persona puede aprender a recuperar y aumentar su fuerza de voluntad. McGonigal ofrece cinco consejos a seguir, de acuerdo al portal Entrepreneur:

Recuerde sus metas. Cuando tenga la sensación de que está perdiendo la fuerza de voluntad, piense en la actividad en cuestión como algo indispensable para alcanzar sus metas. McGonigal asegura que la fuerza de voluntad se agota con facilidad, si desconecta esa actividad de los objetivos que espera conseguir.

Digamos, si a usted le disgusta la facturación y la observa como tarea aislada hará que le sea difícil reunir la energía necesaria para efectuarla. Pero si observa la facturación como una manera de construir un negocio próspero, la pasión que siente por su empresa le ayudará a centrarse en esa actividad.

Lidie con el estrés. Cuando se dirige hacia una meta concreta, usted está en la obligación de hacerle frente a los momentos difíciles. Para alcanzar ambiciosos objetivos, es necesario persistir incluso en condiciones de estrés, o cuando la ansiedad, el miedo o la tensión amenazan su fuerza de voluntad.

No descarte practicar ejercicios de relajación o meditación para encontrar un poco de serenidad en su interior. De esa manera, podrá fortalecer su fuerza de voluntad y continuar hacia la consecución de sus objetivos.

Perdone sus errores. Toda persona comete errores, así que su fuerza de voluntad no se verá comprometida si asume esos errores con tranquilidad. Es fundamental perdonarse a sí mismo por los errores cometidos para que, de esa manera, no comprometa su motivación.

Si se tropieza en el camino, tenga en cuenta la manera en que puede hacer un mejor trabajo para no caer en una segunda oportunidad. Eso le permitirá recuperarse y crecer al mismo tiempo.

Establezca una conexión con sus colegas. La fuerza de voluntad se eleva de manera natural cuando nos sentimos reconocidos y apreciados por el trabajo que hacemos. Por lo tanto, las personas que establecen una relación cercana con sus colegas son las que mejor fuerza de voluntad tienen.

Así que cuando se sienta desmotivado o con dificultades para concentrarse, no dude en conversar con un compañero de trabajo o invitarlo a almorzar. Colaborar con personas que marchan hacia una meta común es un modo sorprendentemente efectivo de restaurar la fuerza de voluntad.

Confíe en que lo hará más fácil. A menudo las personas tenemos dificultades para ejecutar ciertas tareas y, a medida que transcurren las semanas, los meses e incluso los años, pensamos que esas actividades seguirán siendo igualmente complicadas, por lo que, al estar ante ellas, nos rendimos con facilidad.

Para luchar contra ese sentimiento, hay que recordar que toda habilidad mejora con la práctica. Una tarea puede ser difícil, pero no se diga a si mismo que siempre va a ser difícil, probablemente, la tarea le será un poco más fácil cada vez que lo intente.